El presidente de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Argentina , monseñor Jorge Lugones, alertó sobre el impacto en los sectores más vulnerados de las medidas anunciadas esta semana por el presidente Mauricio Macri y su equipo económico y reclamó que haya hechos visibles, más allá del buen diálogo que pueden tener con el Gobierno.
Lugones, que también el arzobispo de Lomas de Zamora, sostuvo que "hay un sufrimiento de la gente drástico y un aumento de las cosas y de la inflación drásticos". Además exigió gradulidad pero para combatir la inflación. "Nosotros somos los que pedimos la gradualidad en el aumento de las tarifas , gradualidad en la inflación .De gradualidad acá no hay nada", sostuvo.
Además opinó que el acuerdo con el FMI ante la suba de tasas y consecuente disparada del dólar "no es un una salida inteligente". En este orden aseveró que "cuando se cierran los caminos de este modo y sólo se apuesta a ese protagonismo financiero, entonces creemos que así no hay salida".
"No nos quedamos tranquilos con lo que se dice. Estamos muy, muy tristes y realmente preocupados porque estamos acompañando muchas comunidades que están sufriendo en este momento este flagelo de la inflación y, además, de la pobreza", remarcó en una entrevista concedida a Radio María, la radio oficial de la Iglesia católica argentina.
También se refirió a la relación que la Pastoral mantiene con el actual Gobierno. En este plano reconoció que "hay buen diálogo y buenos modales", pero que "no hay hechos realmente visibles que ayuden justamente a los sectores menos protegidos que son los más pobres, que son los que están bajo el índice de pobreza, incluso los que están en el índice de indigencia".