La elección de representantes de abogados del interior del país para el Consejo de la Magistratura Nacional, organismo que selecciona y controla a todos los magistrados federales del país, dejó armado un nuevo tablero en la política colegial de La Plata. Los posicionamientos y apoyos previos resultaron determinantes en el mapa del poder que se está confeccionando de cara a las elecciones de 2020 en el Colegio de Abogados de La Plata (CALP).
El triunfo de Marina Sánchez Herrero en La Plata y en el ámbito nacional dejó muy bien posicionados a los abogados radicales alineados detrás de Miguel Berri, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Playa (UNLP).
El abogado además es funcionario en la Fiscalía de Estado bonaerense. Desde allí en conjunto con la casa de altos estudios edificó el triunfo de la candidata de Cambiemos.
En La Plata votaron 995 matriculados. La candidata del macrismo obtuvo 432 sufragios, superando por más de 100 votos a Bienvenido Rodríguez Basalo, que obtuvo 410 apoyos en las urnas.
Rodríguez Basalo contó con el apoyo del presidente del CALP, Hernán Colli, quienes tienen una alianza estratégica dentro del Colegio de Abogados de la provincia de Buenos Aires (Colproba). Este posicionamiento lo ubica a Colli del lado de los perdedores, aunque no quedó a la intemperie, ya que su socio político y predecesor en la presidencia del CALP, Fernando Levene, simuló su apoyo a la lista ganadora de Sánchez Herrero.
Los analistas de la política local siguen de cerca estos posicionamientos y ya miran el turno electoral 2020 en el CALP, donde se pone en juego el sillón de la máxima autoridad colegial.
En la elección de medio término del año en curso, los radicales e independientes nucleados en Nuevo Colegio, lograron acceder a un cargo en el Consejo Directivo del colegio profesional.
Números en manos, los armadores de la política colegial en La Plata ven como, año tras año, el oficialista Movimiento Innovador fue perdiendo apoyo. En 2014 ganó con el 55% de los sufragios, en 2016 el triunfo fue con el 39,4% y en 2018 con 38,7%. Si bien resultó ganador, en 4 años perdió el 17% de aval en las urnas, con niveles de participación cada vez más bajos, según muestran los registros oficiales.
