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El Gobierno achica Fabricaciones Militares y despide empleados en Azul

La unidad se encuentra cerrada y copada por fuerzas de seguridad. Impiden el ingreso delos trabajadores que se manifiestan en la ruta 3. Responde a un plan nacional de reducción.

Los más de 230 trabajadores de la regional de Fabricaciones Militares, radicada en la localidad bonaerense de Azul, iniciaron este martes un corte en la ruta nacional N 3, en reclamo de sus fuentes laborales.

 

En el primer día hábil del año, los empleados del Estado no pudieron ingresar a su lugar de trabajo, que se encuentra cerrado y ocupada por fuerzas de la policía federal.

 

 “La fábrica, a través de un comunicado, indica que desde el 2 y hasta el 14 de febrero permanecerá cerrada para evaluar las capacidades productivas” afirma Juan Cacace, delegado de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).

 

 

“Estamos en un estado de total incertidumbre, por eso vinimos hoy acá, por nuestros propios medios, para que nos den respuestas claras” detalla el delegado gremial, quien explica que el pasado jueves, le habían concedido un asueto laboral, sin advertirles que la semana siguiente la fábrica estaría cerrada. Esto motivo acciones gremiales durante el fin de semana, pero sin resultados positivos.

 

El posible cierre o reducción de personal en la Fábrica de Azul responde a un plan nacional, en el que se busca que la empresa sea “viable”.

 

Según declaró al diario La Nación, el interventor nacional de FA, Luis Riva, "no hay un plan para desactivar ni vaciar" las fábricas, sino que se está "planificando el futuro".

 

Y remarcó que en esta etapa se está “definiendo la capacidad de producción”, es decir,  evaluando cómo será el recorte de la estructura.

 

Y en esta condición, Azul es la planta con mayores posibilidades de recorte inmediato.

 

 

 

"Estamos evaluando cómo seguirá; la cordobesa (la plata ubicada en Villa María) tiene instalaciones y personal para asumir toda la producción; nos dejaron una empresa no viable, se iba a estrellar en cualquier momento" aseguró Riva.

 

“El día 31 por la tarde fuimos a la Justicia Federal para hacer una denuncia porque acá no solo se pone en riesgo la fuente laboral de 230 familias, sino que está en riesgo la gente y los vecinos cercanos a la fábrica, porque todavía hay producción que está a medio terminar y hay polvorines cargados, y con esta resolución (de prohibir el ingreso de empleados) los servicios esenciales están sin la debida atención. No hay control de luz, agua, trablero” aseguró Vanina Zurita, secretaria general de ATE Azul.

 

 

 

La vicegobernadora Gisela Scaglia y Mauricio Basso, el nuevo secretario de Estado del gobierno de Maximiliano Pullaro.
Santiago Caputo. 

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