La Legislatura bonaerense tiene pautado sesionar el próximo miércoles 27 y jueves 28 de diciembre con un claro objetivo pedido por la gobernadora María Eugenia Vidal. Se trata de la adhesión de la provincia de Buenos Aires al pacto fiscal que el Gobierno nacional alcanzó a mediados de noviembre junto a otras 22 provincias y que se traduce en plata fresca para las arcas bonaerenses.
El presidente Mauricio Macri espera que el acuerdo fiscal con todas las provincias argentinas, a excepción de San Luis que rechazó el trato, empiece a regir a partir del 1 de enero de 2018. La gobernadora firmó el convenio a cambio de retirar la demanda de bonaerense contra el estado nacional por el Fondo del Conurbano que esperaba una resolución de la Corte Suprema de Justicia.
Vidal había presentado la demanda contra Nación con el respaldo de los ya ex senadores peronistas Juan Manuel Abal Medina, María Laura Leguizamón y el margarito Jaime Linares. Ese pedido implicaba el reintegro de 300 mil millones de pesos.
Cuando el Gobierno cerró el pacto fiscal con –casi- todas las provincias el cálculo de ese paquete derivó en que la provincia comandada por Vidal percibirá en 2018 40 mil millones de pesos que se componen de 20.000 millones por coeficiente de coparticipación del impuesto a las ganancias y se 20.000 millones más como asignación específica del Tesoro.
Entonces, con ese esquema, la Cámara de Diputados y de Senadores sesionará el próximo miércoles 27 de diciembre.
Para adherir al pacto fiscal, Cambiemos necesitará de los dos tercios para tratar la iniciativa ya que llega a la Legislatura en período extraordinario y sin dictamen de comisión.
En la previa ningún bloque se opondría a la norma que implica, en definitiva, más recursos para la provincia. Sin embargo la oposición podría observar o preguntar cómo será la distribución de ese dinero.