Andrés “Andy” Freire se comprometió a sentarse en su banca el 10 de diciembre de 2017 y jurar como legislador porteño, a pesar de que se resistió a ser candidato hasta minutos previos al cierre de listas en la Ciudad porque nunca quiso abandonar el Ministerio de Modernización, Innovación y Tecnología. La promesa será cumplida, pero su estadía en la Legislatura porteña será menor a la que indica el mandato: asumirá y luego de unos pocos meses dejará el Parlamento con probable destino en el Gobierno Nacional o de vuelta al Ejecutivo porteño.
Tras no quedar otra opción más que aceptar la candidatura a legislador, en la cabeza de Freire el esquema perfecto era transitar la campaña y regresar a la cartera que Horacio Rodríguez Larreta le encomendó el 10 de diciembre de 2015. Eso implicaba ni pasar por la Legislatura, una candidatura testimonial. Pero el mandamás porteño y su vice, Diego Santilli, se encargaron de hacerle entender que debía asumir porque el PRO no avalaría candidaturas testimoniales. “No va a hacer lo que hizo (Daniel) Scioli, va a asumir la banca y luego se va”, explicaron fuentes de la Jefatura de Gobierno.
El emprendedor se sintió rodeado y comprendió, para el agrado de buena parte de sus compañeros de gabinete, que antes de fin de año juraría como legislador porteño, lejos de las ventajas de un ministerio y la gestión ejecutiva. Sin embargo, logró negociar una licencia durante la campaña electoral para luego regresar a su despacho, a contramano de sus pares nacionales, que renunciaron a los ministerios para ser candidatos, como el caso de Esteban Bullrich.
Nada se sabía de su paradero hasta que en las últimas semanas el escenario se modificó. Ahora Larreta evalúa devolverle toda la estructura de Modernización y olvidar las rencillas preelectorales. Según pudo saber Letra P, Freire confiesa ante sus íntimos que en marzo dejará su despacho en la Legislatura y su lugar quedará para Gonzalo Straface, decimoséptimo candidato a legislador.
Cerca del funcionario y legislador electo se esfuerzan por desmentir todas las versiones y afirman que Freire asumirá su banca y completará su mandato. Algo contrario a la información que manejan, incluso, cerca de Larreta.
Su destino aún es incierto, pero se barajan dos opciones: regresa a Modernización o buscará desembarcar en la administración nacional, gracias a la buena relación que conserva con el presidente Mauricio Macri. La primera posibilidad es la más certera y ya preocupa al resto de los ministros porteños, que empujaron todo lo que pudieron para que Freire saliera del gabinete.
¿Qué cambió para que Larreta pasase de correrlo virtualmente del gabinete a devolverle a Freire su lugar? Sería como una especie de “premio” por transitar la campaña sin mayores problemas, pese a los reiterados reparos que puso para integrar la boleta de Vamos Juntos y los cuestionamientos internos por su gestión. Algunos creen que es una “prueba” del líder del PRO porteño. Una “nueva oportunidad” para un ministro con repetidos cortocircuitos con sus compañeros.
Sin embargo, hay quienes no avizoran un panorama alentador. “Si vuelve a asumir ya no tenemos nada que deberle. Fue candidato aunque no quería saber nada, hizo campaña y resultó mejor de lo que creíamos. Ahora, ante cualquier problema estará a tiro de decreto”, aventura un ministro porteño que conoce a Larreta hace años. ¿Será un premio por las negativas que recibió por cada cosa que pidió en caso de ingresar a la Legislatura? Freire se veía como jefe de bloque y se lo negaron. Al igual que Claudio Romero, propuso encabezar la Comisión de Presupuesto y le aclararon que tampoco había lugar allí porque estaría en manos de Paula Villalba. En tanto, la posibilidad de quedarse con la vicepresidencia I fue imposible ya que está reservada para Francisco Quintana desde hace meses,
Pese a las internas, Larreta lo defendió hasta el último minuto, a pesar de que los compañeros de su gabinete, en especial los funcionarios más íntimos del alcalde, lo cuestionaban a rabiar. El objetivo del creador de OfficeNet, como lo demostró durante toda la campaña electoral, es regresar a su despacho frente al Parque Lezama, pero las internas por su ministerio le juegan en contra.
En caso de que Freire no vuelva a su lugar, el futuro de ese ministerio es una incógnita. Hay versiones de todo tipo, pero Larreta aún no tomó la decisión. Por estas horas, el alcalde está en Londres junto al secretario General y de Relaciones Internacionales del Gobierno porteño, Fernando Straface, y el propio Freire.
Se espera que a su regreso se avance con el poroteo, por el que ya mostraron interés ministros como Eduardo Macchiavelli y Bruno Screnci Silva. El primero podría quedarse con la administración del Ecoparque (Ex Zoo porteño), mientras que el ex legislador podría absorber las subsecretarías de Empleo y Pyme. Como informó Letra P, otra opción que se baraja es dividir el ministerio y otorgar la estructura de Modernización (pasaría a ser Secretaría) a Fernando “Bana” Benegas, actual secretario de Planificación y Coordinación de Gestión, ponderado por Larreta por el arduo trabajo que implica seguir el día a día del “tablero de control” de Gobierno.
Son todas especulaciones y tironeos propios de la política porque si Larreta decide que Freire vuelve a Modernización con las mismas condiciones, toda la negociación subterránea se desmorona.
Días atrás, en el marco de una reunión entre legisladores y ministros, un chiste de Martín Ocampo graficó lo que se vivió puertas adentro del Gobierno porteño durante las semanas de tensión en las que Freire amenazaba con desafiar a Larreta y rechazar la candidatura, cuando todo el PRO esperaba una definición positiva y hasta el propio Macri preguntaba si su inclusión en la lista estaba resuelta, como señaló el periodista Ezequiel Spillman en Perfil.
El ministro de Justicia y Seguridad hablaba de la gestión de su cartera, de la Legislatura y las leyes de fin de año. En un pasaje de su alocución se refirió a Freire, presente en el encuentro. Fiel a su estilo bromista, Ocampo, entre risas, lo encaró: “Andy, te conocíamos poco. Con el tiempo nos conocimos y pudimos trabajar en conjunto, aunque tuvimos que enviar a toda la Policía de la Ciudad para que firmes como candidato a legislador”. Este chiste interno permite dimensionar la compleja negociación que se tejió para que Freire acepte la candidatura y ayuda a comprender por qué Larreta evalúa devolverle el cargo, tras obligarlo a dejarlo para que haga campaña, pese a su negativa.
A contramano de lo que se especula, Freire jurará el 10 de diciembre junto con todos los diputados porteños electos en las elecciones legislativas de octubre. Sin embargo, su estadía será muy breve y confía en regresar al ministerio porteño. Mientras tanto, buena parte de sus compañeros espera que si hay vuelta, esta no sea triunfal. El triunfo será todo de Freire, que volverá al ministerio que diseñó junto a Larreta, a quien conoce desde los inicios del Grupo Sophia y decidió acompañar en la gestión porteño a fines de 2015, poco tiempo después de rechazar la conducción del Ministerio de Producción de la provincia de Buenos Aires que le ofreció María Eugenia Vidal.