De acuerdo al proyecto de presupuesto 2017 presentado en el Congreso por el gobierno de Mauricio Macri, se prevén recortes en las partidas solicitadas por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y al Servicio de Sanidad Animal y Vegetal (SENASA) para el corriente año, por un monto superior a los 3 mil millones de pesos, algo que, según advirtieron en ambos organismos, impactaría en la continuidad laboral de cientos de empleados.
Por el lado del SENASA, se contemplan gastos por 3800 millones de pesos, un ajuste que en términos porcentuales se ubica por debajo de la inflación de los doce últimos meses ubicada en torno al 40 por ciento. Según explicaron a Télam desde el organismo sanitario, las evaluaciones presupuestarias preliminares que elevaron al Ministerio de Agroindustria y a la Jefatura de Gabinete reportaron una necesidad de fondos de 5.800 millones de pesos, por lo que "sorprendió mucho ver que se asignaban 3800".
"Con estos números no vamos a poder trabajar y hay que tener en cuenta que el SENASA fiscaliza cerca de 35 mil millones de dólares en exportaciones", dijo una voz del organismo.
En tanto, tras una reunión con el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaille, los representantes de los trabajadores del organismo nucleados en ATE decidieron levantar un paro que llevó ocho días ante la promesa del funcionario nacional de que “más allá de lo que ocurriera con el presupuesto la plata para el organismo iba a estar". De todos modos, la inquietud persiste en torno a las futuras problemáticas que podrían surgir para el pago de sueldos.
En lo que refiere al INTA, el recorte sería mayor a 1100 millones de pesos respecto al pedido de fondos solicitadeo por el organismo para el corriente año.
Según explicó a Télam uno de los máximos directivos del Instituto, "esta disminución tiene que ver con cubrir vacantes, obras de laboratorios e investigación, pero también con el pago de sueldos". Y agregó: "Tenemos $218 millones menos para pagar sueldos que el año pasado, con una inflación superior al 40%, lo que implica tener que dejar en la calle algo más de 600 trabajadores". En tanto, ejemplificó: "En el inciso 4 del presupuesto existen 500 mil pesos para inversiones, cuando este año tenemos cerca de $63 millones”.
Bajo este escenario, los trabajadores del INTA emitieron un comunicado, donde manifestaron su preocupación por "la situación de incertidumbre que se vive en nuestra institución, con falta de asignaciones presupuestarias, la indefinición de la continuidad del personal contratado y los despidos que afectan a los trabajadores del sector público y privado”.