La Corte Suprema de Justicia anuló este jueves el tarifazo aplicado por el gobierno del presidente Mauricio Macri en el servicio de gas. La medida del máximo tribunal alcanza a los usuarios residenciales.
De esta manera, en lo que supone un duro revés para la Casa Rosada, el máximo tribunal avaló el fallo emitido el 7 de julio pasado por la Cámara Federal de La Plata. Lo hizo basándose en el mismo argumento: estableció que, para la fijación de tarifas, la audiencia pública previa es de cumplimiento obligatorio.
En ese sentido, la Corte, con los votos de sus cuatro integrantes (Ricardo Lorenzetti, Elena Highton, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti), señaló que esa instancia es “inexorable” para determinar el precio del transporte y distribución del fluido.
Concretamente, según informó el Centro de Información Judicial (CIJ), el sitio de noticias de la Corte, el tribunal, “por unanimidad”, resolvió:
• Que para la fijación de tarifas de gas, la audiencia pública previa es de cumplimiento obligatorio.
• Se confirma la sentencia apelada en cuanto declara la nulidad de las resoluciones cuestionadas.
• La decisión se circunscribe al colectivo de los usuarios residenciales.
• Respecto de ellos, las tarifas deben retrotraerse a los valores vigentes previos al aumento dispuesto por las resoluciones que se invalidan.
• Se mantiene la tarifa social.
• Se pone en conocimiento del Congreso de la Nación la necesidad de dar cobertura al cargo de Defensor del Pueblo de la Nación.
• Se recuerda a los tribunales el riguroso cumplimiento de la acordada de la Corte Suprema de Justicia sobre procesos colectivos.
El fallo la máxima instancia judicial de la Nación suspende, de esta manera, el aumento aplicado por el Ministerio de Energía para los usuarios residenciales, para quienes vuelven a regir los valores vigentes hasta el mes de febrero, cuando fue dispuesto el incremento a través de las resoluciones 28 y 31 de esa cartera.
El 11 de julio, cuatro días después del freno impuesto por la Cámara Federal platense, el Gobierno dispuso topes de 400% y 500% (para residenciales y empresas, respectivamente) al aumento sobre las facturas del servicio. Fue una jugada destinada a persuadir a la Corte sobre la “razonabilidad” del incremento con vistas a la determinación que debía tomar el tribunal a través de la resolución conocida, finalmente, este jueves.
REVÉS. La decisión de la Corte representa un golpe al estómago de la política económica del Gobierno, que ha venido planteando una opción dramática: si no tarifazo, la alternativa es mantener un alto déficit fiscal a partir del mantenimiento del nivel de subsidios a las tarifas que aplicaba el kirchnerismo.
El martes, en su presentación ante un plenario de comisiones de la Cámara de Diputados, el ministro de Energía, Juan José Aranguren, había defendido los aumentos y había negado que se trataran de un "tarifazo". Dijo, concretamente, que fueron "lo más gradual posible" y que su disposición fue el único camino que podía tomar el presidente Macri en virtud de la situación heredada por el nuevo gobierno.