El cometido de incrementar la presión sobre la administración macrista en lo que refiere a la exigencia de una modificación en el impuesto a las Ganancias, provocó la concreción de un encuentro dilatado en el tiempo. Los titulares de las tres CGT, Hugo Moyano (Azopardo), Antonio Caló (Alsina) y Luís Barionuevo (Azul y Blanca), almorzaron en la histórica sede cegetista para dar señales así de una posible y próxima reunificación de la central obrera.
Al respecto se refirió el secretario adjunto de la CGT Azopardo, senador Guillermo Pereyra, quien ratificó que la cumbre entre los jefes sindicales tiene como objetivo "definir una postura" para pedir que se avance en el Congreso con una modificación en el Impuesto a las Ganancias, al tiempo que adelantó que las centrales obreras peronistas están a "un paso" de la unificación.
Por su parte, el titular de la CGT Alsina, Antonio Caló, calificó como un "error" la decisión del Gobierno de aplicar una modificación en el impuesto a las Ganancias hasta el año próximo y aseguró que esto fue una "decepción" tanto para él como para Moyano y Barrionuevo.
Asimismo, recalcó que "se está transitando el camino de unidad de la CGT", aunque "por ahora" los tres sectores están actuando "como un frente gremial". Al ingresar a la sede sindical de Azopardo 802, Caló insistió en que el piso de aumento salarial para este año debe rondar el 30 por ciento y se pronunció en contra del protocolo antipiquetes que quiere implementar el macrismo.