El intendente de General Pueyrredón, Carlos Fernando Arroyo, alzó la voz por la gravísima situació que atraviesa su municipio, en el marco de una temporada de verano que no está llevándose a cabo como hubiese querido. Le pidió ayuda al presidente Mauricio Macri y se mostró preocupado por la no aprobación del Presupuesto bonaerense: "Eso la complica a ella (Vidal), pero también a mí”.
En una conferencia de prensa, les pidió a todos los vecinos que le tengan “paciencia” al gobierno y que “colaboren”. Todo, luego de brindar un diagnóstico bastante pesimista acerca de cómo están las finanzas del municipio, debido a la pesada herencia recibida de Gustavo Pulti.
“Algunos inmuebles lucen pintadas que realmente son vergonzosas y que atentan contra la limpieza y la estética de Mar del Plata; es horrible que una ciudad esté así”, expresó, explicando que el gobierno anterior no le dejó plata "ni para comprar una caja de escarbadientes".
Arroyo le pidió “un poco de paciencia” a la gente, ya que “no podemos resolver en 30 días lo que no se hizo en años. El contribuyente paga sus impuestos y quiere servicios. Tiene razón, pero nos encontramos sin un peso”, remarcó, para luego apuntar contra Macri y Vidal, presionándolos porque aún no recibió fondos que habían sido prometidos.
El intendente reveló que el gobierno nacional le había prometido una ayuda “que no ha ayudado”, y en cuanto a la gobernadora, dijo que "todavía no le aprobaron el presupuesto. Eso la complica a ella, pero también a mí".