Si existe una característica del perfil político de Alejandro Granados es que no tiende a despegarse por completo de las cosas.
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Si existe una característica del perfil político de Alejandro Granados es que no tiende a despegarse por completo de las cosas.
A pesar de aceptar la convocatoria de Daniel Scioli para ejercer el cargo de ministro de Seguridad bonaerense, el hombre de Ezeiza, como intendente en uso de licencia, nunca dejó de conservar su influencia en las decisiones que se tomaban dentro de su Comuna.
En tanto, por estos días, más allá de su retorno como mandamás del pago y del cambio de color político en Provincia, Granados tendió puentes como María Eugenia Vidal para mantener su impronta dentro de la cartera que abandona.
Así, logró dejar a uno de sus principales laderos, Fernando Jantus, al frente de la Subsecretaría de Planificación del Ministerio de Seguridad, área que se posiciona como una de las más pesadas del organigrama ministerial, ya que, bajo su ala, se abarca la Superintendencia de Policía Local, Defensa Civil, Protección Ciudadana, entre otros organismos, lo cual representa, aproximadamente, un tercio de la cartera.