NUEVA CONDUCCIÓN

Tensión y ruptura en el MUP, con versiones cruzadas de los sectores en pugna

Un espacio asegura que hubo recambio de autoridades pero el otro desmiente y reafirma su conducción. Denuncian incidentes y otros hablan de una “mudanza”.

 

Después de las elecciones nacionales el  Movimiento de Unidad Popular (MUP) atravesó una crisis en la que dos sectores se enfrentaron por la conducción del espacio kirchnerista. De un lado acusan un “recambio” y denuncia incidentes, del otro lado niegan todo.

 

Primero trascendió el apartamiento del secretario general, Federico Martelli, y se informó la conformación de su nueva mesa de conducción, que denunció destrozos y robos en la sede nacional, por los que apunta a las anteriores autoridades.

 

Mediante un comunicado, el MUP confirmó el apartamiento “de algunos de los miembros de su dirección”, y la conformación “de una mesa ejecutiva de transición, que regularizará los ámbitos de dirección de la organización en debate federal y democrático durante los próximos seis meses, a partir del día de la fecha y pondrá todos sus esfuerzos en concretar la unidad del Peronismo”.

 

La nueva mesa está formada por el secretario general, Luis “Pilo” Diaz, el secretario político, Marcelo von Schmeling, el secretario de Organización, Rodrigo Gibson, el secretario de Relaciones con las provincias, Agustin Ramponelli, Alexis Rizo, en Juventud y Guillermo Souza, en Articulación Territorial. La resolución fue acompañada por las mesas de la Ciudad de Buenos Aires, Tucumán, Santa Fe, Corrientes, Catamarca, Santiago del Estero, Río Negro y diversas regionales bonaerenses.

 

Tras el ballotage, el MUP, una de las organizaciones que más fuertemente acompañó la candidatura presidencial de Daniel Scioli, se sumergió en un debate sobre el desempeño electoral del peronismo y los tiempos que vienen. Durante esa discusión, la mesa directiva decidió pedirle a Martelli que diera un paso al costado. Según detalló la nueva conducción “no hay ninguna posibilidad de acuerdo entre aquellos quienes defendemos y seguiremos defendiendo los ideales peronistas, y los oportunistas que encaramados en puestos de dirección y contratos con el estado pretendieron desviar los verdaderos objetivos de nuestra lucha y transformarlos en beneficios personales”.

 

Días después, se produjeron destrozos en la sede nacional, ubicada en avenida Callao 253. De acuerdo con la denuncia policial, también se robaron 12 computadoras, televisores, mesas, sillas. La dirigencia del MUP apunta por los incidentes al ex secretario general, Martelli.

 

La versión de Martelli

 

Desde el sector que conduce el secretario General del MUP, Federico Martelli, negaron cualquier tipo de modificación en la estructura de las autoridades de la organización kirchnerista

 

En ese sentido, advierten que se produjo un alejamiento de un grupo de militantes con “intención de autoproclamarse como conducción del MUP”. Según informaron desde el sector de Martelli, quienes firmaron el comunicado que circuló “ya no forman parte del MUP y no tienen representatividad alguna en la estructura nacional”.

 

Además, precisaron, según su versión, que se fueron tres regionales de la Ciudad de Buenos Aires, Morón y 3 de Febrero. Por otra parte, negaron incidentes entre las facciones, al tiempo que explicaron que las fotos que circularon con “destrozos” en el local que el MUP tiene sobre la Avenida Callao muestran la mudanza el fin del contrato de alquiler. A raíz de esta situación, se decidió “vaciar” el departamento.

 

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