La demora en conformar el bloque “Cambiemos” en el Senado bonaerense comienza a mostrar sus consecuencias internas.El PRO y el sector oficialista o "sanzista" de la UCR acordaron conservar el formato de Cambiemos, para evitar desconfianzas, y sostener mayor poder en el ámbito parlamentario. Pero los senadores radicales resisten la fusión, e insisten en convivir en un interbloque y conservar cada socio su independencia partidaria.
La discusión se torna anárquica por el hecho de no existir un pre acuerdo parlamentario.
Sucede que ninguno de los socios esperaba obtener la gobernación bonaerense, y por ende, la presidencia del Senado.
En las previas a la elección del 25 de Octubre, las posibilidades de máxima hablaban de conformar un interbloque.
Por eso, ahora resulta difícil domar a la tropa. Al menos así comentan en los acalorados pasillos legislativos.
El electo vicegobernador, Daniel Salvador, junto al senador nacional, Ernesto Sanz, operan sobre los correligionarios, para mantenerlos en el corral de Cambiemos.
Pero hasta el momento los resultados no han sido positivos.
Alertados, desde el macrismo, desenfundaron un plan B, que habla de proponer la creación de una vicepresidencia, que tal cual sucedió en Diputados, que actúe como doble comando con la presidencia.
Es decir, ambos cargos tendrían firma. La otra opción sería darle a la actual vice 1º esa facultad.
Esto significaría reformar el reglamento del Senado, una maniobra por demás habitual en los últimos años.
De hecho, en 2013, cuando el triunfal Frente Renovador se expandía en el ámbito territorial y parlamentario, se negoció la creación de la vicepresidencia 4º.
El FpV pretendía conservar la Vice 1º, que había sido asumida de forma virtual por el designado Secretario de Seguridad, Sergio Berni.
Y para esto, le concedió al massismo un nuevo cargo.
No fue la única vez que se retocó el reglamento. En otras ocasiones se hizo con la sola intención de hacer daño.
En 2009, cuando las peleas en el FpV estaban en plena ebullición, tras la derrota electoral en manos de Unión PRO, sucedió un chispazo que terminó en la reforma del reglamento.
La víctima fue Ariel Franetovich, quien siendo intendente de Chivilcoy había ingresado como testimonial en la lista de senadores.
El randazzista, fue convocado por el gobernador, Daniel Scioli, para ocupar la cartera de Asuntos Agrarios, y planeaba pedir licencia a su banca.
Pero el entonces vicegobernador, Alberto Balestrini, apuro un cambio interno por el cual, no se podían ocupar dos cargos de esas características.
Finalmente, Franetovich renunció, y asumió como ministro. No sin antes dejar en claro su malestar.
De todas maneras la resolución se observará a partir de la próxima semana, cuando se sepa si Mauricio Macri, es electo presidente de la Nación o pierde el ballotage con Daniel Scioli.