Antes de que comience la sesión de este jueves, González pidió que se pase a un cuarto intermedio con los jefes de bloque. Todo esto previo a lo que sería la discusión sobre tablas de la creación de un órgano bicameral de seguimiento de los docentes –una iniciativa de Marcelo Díaz, del Frente Progresista Cívico y Social-.
Tras esa reunión, los diputados se preparaban para votar un proyecto de resolución del presidente de la Cámara, en donde se buscaba exhortar al poder Ejecutivo, a los trabajadores de la educación y a las entidades gremiales a mantener abierto el canal de diálogo que permita lograr un entendimiento que le ponga fin al conflicto laboral.
Eso fue lo que aprobaron los presidentes de bloque y al sciolismo duro no le gustó, porque entendían que se incluía al poder Ejecutivo de una manera que no consideraban correcta.
“Reclamar a las partes abandonen posturas irreductibles, por las consecuencias perjudiciables que ellas producen en el proceso de aprendizaje, formación y sociabilización de nuestros niños, niñas y adolescentes”, dice en una parte el proyecto de González.
“Requerir al poder Ejecutivo provincial extreme las medidas y acciones conducentes a lograr dicho acuerdo”, agrega.
“¿Están acompañando a Scioli o a los docentes?”, se llegó a preguntar un sciolista en referencia a los kirchneristas.
Esto tampoco tuvo el visto bueno del mentor del proyecto para crear la comisión bicameral, lo cual hizo que todo se caiga. El proyecto pasó a comisión, y a otra cosa.