El caso de Luciano Arruga es uno de los más relevantes de desaparición de personas en democracia. Está desaparecido desde el 31 de enero de 2009, y según se sabe, lo vieron por última vez en el Destacamento policial de Lomas del Mirador, hecho que provocó la reacción de diferentes organizaciones de Derechos Humanos, que desde hace tiempo trabajan para esclarecer el caso.
“El Estado en todo su conjunto, nacional y provincial, cuando no se logra detectar la impunidad en este tipo de casos, por acción u omisión, es culpable”, eso le decía el abogado de la familia, Juan Manuel Combi, a Letra P, los primeros días de febrero, cuando había novedades. Pero hoy, como desde hace tiempo, la situación de la causa sigue paralizada y eso provocó la reacción del círculo íntimo del joven desaparecido. “La investigación nunca comenzó, pese a haber sido anunciada hace un año con bombos y platillos”, remarca el comunicado, que demanda la expropiación del inmueble donde fue visto por última vez.
“Nosotros queremos que esa casa sea un Espacio para la Memoria, pero el Municipio de La Matanza (así como también las Secretarías de Derechos Humanos de Provincia y Nación, pronunciándose con su silencio cómplice) se niega a entregárnoslo y sigue alquilándolo a su dueño: queremos expropiación y cesión definitiva a Familiares y Amigos de Luciano Arruga”, admitieron los familiares, quienes recordaron la vigencia de una medida cautelar porque “tiene que ser investigado y nadie puede modificarlo”.
Además, denunciaron que la Gendarmería, encargada de preservarlo mientras se mantenga la cautelar, “estaciona en el garaje del lugar autos particulares y, en vez de estar con un móvil correspondiente en la puerta controlando lo que sucede en la parte delantera, está instalada adentro del ex Destacamento”.
Por último, de forma lapidaria contra diferentes estamentos del Estado, plantearon que “cada promesa mentirosa e incumplida de cada funcionario en relación a la conversión de ese sitio de muerte en un sitio de vida, agrava la violación a los derechos de Luciano”.