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Balcarce: crean el Museo de la Educación Inicial

El Jardín de Infantes Nº 901 de la ciudad de Balcarce inauguró un Museo de la historia de la educación inicial del distrito homónimo, que guarda fotografías, documentación, objetos, y el relato oral de las primeras maestras jardineras del lugar.

A lo largo de 6 años fueron recuperando los registros de la continuidad de una educación que gradualmente logró imponer su centralidad pedagógica, y que se incluyen en este proyecto bautizado “Al rescate del archivo”, inaugurado este 2013, al cumplirse 65 años de la creación del establecimiento.

 

Fundado un 27 de junio de 1948, el Jardín de Infantes Nº 901 pertenece a un primer grupo de 29 establecimientos de nivel inicial creados en la provincia de Buenos Aires a partir de la Ley Simini, del año 1946, que planteó la enseñanza preescolar gratuita y obligatoria desde los 3 hasta los 5 años.

 

La aprobación de esa Ley Nº 5.096 dio origen a los Jardines de Infantes de la Provincia  y organizó la entonces denominada Rama Inicial del territorio provincial, creándose la Inspección General de Jardines de Infantes y la Dirección de Educación Preescolar.

 

Pero en 1951 fue derogada y reemplazada por la Ley 5.650, que definía la educación preescolar como optativa.

 

En el año 2007, la nueva Ley Provincial de Educación (Nº 13.688) sancionada, establece la obligatoriedad de  la sala de 4 y 5 años, en consonancia con la Ley Nacional de Educación (Nº 26.206).

 

Aquella Inspección General de Jardines de Infantes creada al amparo de la Ley Simini mostró se importancia mediante la actividad de los inspectores. Y la memoria privilegiada de quienes ejercieron la docencia en los inicios del nivel rescata ahora el rol fundamental de estos, entre ellos el de una de las pioneras balcarceñas, Isidora de Vega, cuyo nombre llevan varios jardines de infantes.

 

Anécdotas y recuerdos componen el “corpus” de la historia oral relatada por quienes vivieron los inicios de este nivel de la enseñanza. Junto con sus narraciones se acumula en la vitrina del Museo el material fundacional, incluso el pedagógico. También incluye grabaciones de los años 60, diapositivas, películas, y el raconto de las primeras dificultades.

 

Aydeé Ispizúa y Mabel D’Annunzio, primeras maestras jardineras de Balcarce, que estudiaron en Bahía Blanca, donde había cuatro institutos formativos, cuentan que los dos mayores inconvenientes eran lograr la formación de maestras especializadas y la asistencia de los chicos.

 

Testimonio de la solución a esas dificultades son las fotos del Chevrolet del año 45, que su dueño, el señor Gigena, había adaptado para transportar una banda de música con sus instrumentos, pero que terminó siendo utilizado para  llevar a los alumnos del jardín de infantes convirtiéndose en el primer transporte escolar del distrito. Reemplazó así al carro tirado por caballos empleado para tal fin en otros partidos.

 

La historia de la educación en el distrito retrotrae a la de la educación en el país, que encuentra en Domingo Faustino Sarmiento al promotor del primer modelo de institución educativa para la primera infancia, y en la educadora Juana Manso, a quien fundó el primer Jardín de Infantes subvencionado por el Estado en la ciudad de Buenos Aires, en 1870.

 

Cinco años más tarde, en 1875, la sanción de la Ley de educación de la provincia de Buenos Aires, estipularía como función de los Consejos Escolares de Distrito la creación de escuelas y de jardines de infantes.

 

En 1884, la Ley de Educación Común Nº 1420 incorporó al Jardín de Infantes al sistema educativo argentino. El primero fue el de la Escuela Normal de Paraná, creado ese año y cuya directora, Sara Chamberlain de Eccleston, fue una de las maestras traídas por Sarmiento desde Estados Unidos y quien inició la formación para maestras especializadas en infantes.

 

Precisamente su nombre es el que lleva el Jardín de Infantes Nº 901 de Balcarce, que ahora creó este Museo para preservar, conservar y dar a conocer la riqueza de la historia de la educación inicial en el distrito.

 

La comunidad podrá acceder a las fotografías del plantel de docentes y alumnos, al registro fotográfico en la publicación “Horas Felices” realizado por la propia Dirección General de Escuelas; al cuaderno del primer grupo de alumnos firmado y sellado por la primera directora.

 

 También podrá ver los telegramas enviados entre 1948 y 1974 por Inspección General o los firmados por el primer Inspector General de Jardines de Infantes, Jaime Glattsteit, gracias a esta iniciativa que abre sus puertas para que se conozca el esfuerzo de una educación fundamental: la del nivel inicial.

 

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