“Tengo tres hechos iguales. En este año tengo tres golpizas a mujeres solas ,en la cabeza y del mismo tipo”, afirmó el fiscal en el día de ayer en declaraciones a la prensa. “Es un caso que merece la identidad reservada, si algún vecino vio algo estoy dispuesto a tomar declaración en dónde sea y en cualquier momento a todo el que pueda aportar datos” agregó.
Por su parte Ricardo Casal se refirió hoy a lo acontecido con la joven en Saladillo y expresó en declaraciones radiales que “no sé si es venganza, discusión o despecho. Pero para mí está vinculada en ese entorno”. La familia de Agustina cree que se trató de una patota y que la venganza puede haber sido uno de los móviles.
Antes que se desencadene el ataque contra Agustina en Saladillo se suicidó un joven. El trágico final de Marco Darío Gorosito de 22 años ocurrió el viernes por la tarde, entre las causas sobre la muerte que también maneja el fiscal Sarramone aparece una discusión entre Gorosito y su concubina. En este marco, con el final inducido del joven, la hermana de Agustina, Ruth, admitió que Marco tuvo una relación con su hermana.
“Desde un primer momento se dijo que el chico se suicidó por culpa de mi hermana” confesó a los medios Ruth Jimenez. Agustina fue anoche trasladada al hospital de niños Sor María Ludovica de la ciudad de La Plata para su recuperación. La joven sigue en estado de shock, sin comunicarse con nadie.
El fiscal detuvo a cuatro personas de las cuales 3 fueron liberadas ayer por la noche. El joven que quedó detenido tiene entre 18 y 20 y era amigo de Marco Gorosito. Una vecina advirtió que en la madrugada del día en cuestión escuchó gritos y ruidos en el parque pero que no pudo descender de su vivienda porque su esposo no la dejó. Según relató Cristina Fredes al portal saladillense infosaladillo.com.ar “Esta chica pedía auxilio desesperadamente y el otro decía dale vos, dale vos y se corría la bolilla”. Fredes también advirtió que eran 5 personas, cuatro masculinos y una femenina.
La hermana de Agustina también dijo que la joven recibió amenazas a su cuenta personal de facebook y dichos mensajes se borraron cuando sucedieron los hechos, una de las amenazas advertía “me sacaron a mi hermano, me las vas a pagar”.
Lo cierto es que mientras la Agustina Jimenez no salga del estado de conmoción en el que se encuentra difícilmente se pueda cerrar el círculo de la investigación. Desde Saladillo, la sociedad se divide entre seguir la cuestión del psicópata por la falta de esclarecimiento de los casos anteriores o inclinarse por la versión que una patota fue la responsable de la joven golpeada.
Facundo Cottet
@facundocottet