“Están queriendo negociar una paritaria (salarial) que siempre se hace en febrero y marzo por adelantado”, señaló la ministra Cristina Álvarez Rodríguez, en un intento por persuadir al Frente Gremial Docente.
En medio del fuego cruzado entre sindicalistas docentes y funcionarios de la administración sciolista, el jefe de Gabinete, Alberto Pérez, tildó la medida de fuerza programada para esta semana como un “paro político e irracional” que dejará a unos 4 millones y medio de alumnos sin clases en toda la provincia. También advirtió que “este paro sólo va a servir para que los docentes cobren dos días menos de clases”.
“La única explicación para un paro intempestivo en medio de una mesa de diálogo es que es un paro político. Simplemente porque (Roberto) Baradel (el titular del gremio de SUTEBA) tiene que demostrar que está en condiciones de hacer un paro”, arremetió el funcionario.
Esa frase de Pérez no fue del todo casual. Durante el fin de semana, el propio Scioli, al participar del Día del Militante Peronista, jugó una carta fuerte, al indicar: “Nuestros adversarios no están dentro del peronismo”.
En distintos ámbitos institucionales platenses comentan que horas después comenzó a circular por las redes sociales un “panfleto” (sin aparente autor) indicando que el paro docente de dos días era “político” y divulgando, inclusive, a los potenciales “conspiradores”.
“Los que conspiran contra la Provincia hacen paro la próxima semana”, decía el “afiche”, que estuvo acompañado por una foto donde aparecían (por separado) el vicegobernador Gabriel Mariotto; el Secretario General de la CTA, Hugo Yasky; el titular de SUTEBA, Roberto Baradel, y el titular de la AFSCA, Martín Sabbatella.
Tampoco pudo pasar desapercibido el fuerte contraste entre la jefa de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, y la actitud asumida por Baradel, quien convocó a un paro de 48 horas contra el gobierno de Scioli para esta semana, pero evitó sumarse a la medida de fuerza realizada ayer en conjunto por la CGT disidente que conduce Hugo Moyano y la CTA que encabeza Pablo Micheli, como sí lo hizo Petrocini, divulgando además la alta adhesión docente en la provincia.
Baradel forma parte de la CTA oficialista que conduce Yasky, situación que puede dejar al descubierto que su accionar sindical bien podría estar manejado políticamente a control remoto desde la Casa Rosada.
En casi todos los escenarios aparece un trasfondo político. “Todo ocurre debajo de la superficie. Por ahora, pero sólo por ahora, no es visible el incipiente conflicto entre el gobierno nacional y la gobernación platense”, vaticinan desde el Frente para la Victoria K.
En lo coyuntural el único frente de tormenta que planea atender la presidenta Cristina Kirchner pasa por el denominado 7D, ese séptimo día del mes de diciembre venidero donde grupos mediáticos, entre ellos Clarín, deben ajustarse a Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. “Después llegará el momento de atender otros problemas”, explican. Entre esas asignaturas pendientes no habría descartar que Scioli pueda aparecer en la agenda presidencial.
Es que el gobernador Scioli viene avanzando significativamente para “afuera”. El reciente primer Encuentro Nacional de militantes y dirigentes peronistas de “La Juan Domingo”, fue una señal fuerte en términos políticos para la interna del oficialismo K. Ese día juntó a dos economistas con trayectoria, los exministros Jorge Remes Lenicov y Jorge Sarghini, quienes disertaron sobre “Los límites de la actual política económica”.
“Más allá de lo estrictamente gestual, Scioli sólo espera por decantación, ser el “plan A y medio” de la presidenta CFK para una candidatura presidencial 2015, en defensa del proyecto político nacional del kirchnerismo en la Casa Rosada”, especulan con cierta lógica algunos dirigentes del oficialismo.
A ese discurso se suman, de manera discreta, miembros de La Juan Domingo y de la ultra-sciolista “La DOS”, agrupación que en la Sexta tiene como “granaderos” al diputado bahiense Iván Budassi y al exlegislador suarense y actual director provincial del OPDS, Hugo Bilbao.
En la gobernación de calle 6, no pocos ministros procuran que Scioli no se sienta forzado ya a “jugar” su aspiración presidencial, para que eso después no implique terminar pagando un innecesario costo político por desatender la gestión provincial.
Días atrás, Hugo Moyano apuró públicamente a Scioli cuando les pidió a los que tienen “aspiración de ser candidatos”, empezar a marcar las “diferencias” con el kirchnerismo. “Si uno no dice nada y acepta todas las imposiciones, me parece que la gente no lo va a diferenciar”, explicó el camionero.
Dentro de la Legislatura bonaerense, el diputado moyanista, Jorge Mancini, salió a respaldar una eventual candidatura presidencial de Scioli, pero advirtió que primero “hay que pasar las legislativas” del año que viene.
En principio, esta semana, diputados del oficialista FpV pretenderían avanzar con la ampliación del derecho a voto para jóvenes de 16 años en la provincia y con un proyecto impulsado por Scioli que se “cocina a fuego lento”: la limitación del beneficio de la excarcelación para quienes hayan cometido delitos con uso de arma de fuego.
La iniciativa que no desembarcaría al recinto de sesiones, al menos por ahora, es la audaz reforma del Consejo de la Magistratura aprobada la semana pasada por el oficialismo en la Cámara de Senadores.
Ese proyecto de ley busca poner en marcha un sistema de puntajes por antecedentes y evaluaciones periódicas para los jueces ya designados. Establece que para confeccionar las ternas de candidatos, más allá del resultado del examen que actualmente se tiene en cuenta, se otorgue puntaje a los antecedentes de los postulantes y facultades al Consejo para evaluar a quienes ya han sido nombrados magistrados, con el objetivo de constatar que “mantienen las condiciones psicofísicas y éticas entre otras” que les permitieron acceder a sus cargos.
Desde el espacio legislativo del denarvaismo buscarán frenar la iniciativa en defensa de la independencia del Poder Judicial en compañía de otros bloques de la oposición. Una jugada similar podría ensayar la bahiense Nidia Moirano, referente de Francisco De Narváez en el Senado, contra la controvertida Ley de Hábitat.
“Desde Unión Celeste y Blanco votamos en contra del proyecto en Diputados y lo haremos también en el Senado, porque no estamos dispuestos a ser cómplices de una ley que viola la constitución, avasalla derechos individuales y promueve conflictos entre los argentinos”, añaden los “colorados”.
Básicamente indican que “ir contra la propiedad privada, promover las usurpaciones, violar el mandato constitucional, no es de ninguna manera priorizar al pueblo. No somos, no fuimos y no vamos a ser cómplices del autoritarismo, la inconstitucionalidad y la imposición kirchnerista”.
“Francisco habla con Scioli bastante seguido. Tienen una buena relación”. Así explican en el entorno de De Narváez el vínculo con el gobernador. Se sabe, la estrategia de Scioli en los últimos tiempos fue dejar trascender “fotos” como una herramienta política de hacerle llegar mensajes directos a la Casa Rosada.
Días atrás compartió varios actos con el alcalde de Tigre, Sergio Massa, y se sacó fotos de esas que irritan al ultrakirchnerismo salvaje. Ahora el gobernador volvió a fotografiarse con un dirigente crítico del kirchnerismo, como es De Narváez, con quien se encontró en la fiesta de aniversario platense realizada en la sede del Círculo Policial.
(*) Ricardo Salas es Periodista en La Nueva Provincia