“Recorrimos la zona con móviles sanitarios, fumigamos y realizamos una revisación médica de cada uno de los evacuados”, explicó Adrián Tarditti, quien participó del operativo a cargo del Consejo Provincial de Emergencias en La Matanza. El funcionario agregó que además se entregó medicación, pastillas potabilizadoras de agua y se aplicaron vacunas.
El río Matanza tiene 18 afluentes, tres de los cuales vierten gran cantidad de agua al partido más populoso de la provincia. Las aguas bajan desde la zona de Merlo, Marcos Paz y Cañuelas. “A esto se suma que anoche hubo sudestada, de modo que recién ahora está comenzando a descender el nivel del agua”, explicó Tarditti.
Cuando comienzan a bajar las aguas sobreviene el riesgo de expansión de las enfermedades transmitidas por aguas contaminadas. Entre ellas figura el cólera, la leptospirosis, las diarreas y la fiebre hemorrágica argentina.
“Para prevenir esas infecciones producidas se debe utilizar agua segura para beber, lavar alimentos crudos y para la higiene personal, sobre todo de las manos”, indicó el ministro de Salud, Alejandro Collia.
En ese sentido, el ministro explicó que para potabilizar el agua “se pueden usar las pastillas de cloro que está entregando el ministerio de Salud provincial o utilizar 2 gotas de cloro por litro y dejar reposar durante 30 minutos, o bien hervirla 5 minutos”.
Por otra parte, para la limpieza de casas, baños y letrinas, se debe emplear un litro de cloro en 9 litros de agua (1 taza de té en 10 litros de agua). Y en caso de utilizar agua de pozos, cisternas fijas o móviles, se la debe clorar.
El director provincial de Atención Primaria, Luis Crovetto, agregó que dado que los evacuados suelen desarrollar infecciones respiratorias o de la piel como consecuencia de su exposición a las aguas contaminadas “tras la revisación se les entrega a los afectados antibióticos y antitérmicos producidos por el Laboratorio Tomás Perón del ministerio de Salud de la Provincia”.
Explicó también que después de las inundaciones es preciso reforzar la vacunación antitetánica si se sufre una herida punzante o con algún objeto contaminado con materia fecal, suciedad o saliva.