Ampliando el concepto de salud

Por Constanza Paini*

*Licenciada en Psicología de la Universidad Nacional de La Plata. MP-53243.Vicepresidenta de CEAPSI (Centro de Atención Psicológica)

 

En estas últimas décadas, las sociedades, la ciencia y los conceptos, entre otros, han dado un viraje interesante e importante que permite configurar las miradas desde otro punto de vista. Por ello la salud, tema tan controvertido e inquietante no escapa de este cambio de época.

 

La psicología contemporánea adopta la definición de la organización mundial de la salud (OMS), concepto acuñado  desde la década de los 60, que si bien al comienzo fue resistido y cuestionado, de un tiempo a esta parte, se toma como la descripción mas completa de dicho termino. La salud, entonces, para la OMS“es un estado de bienestar completo físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia”.

 

A partir de esto, es que se puede ver con claridad la naturaleza biopsicosocial de la salud, como Así también pone de manifiesto que la salud es más que la ausencia de enfermedad. Teniendo en cuenta el valor amplio que toma esta concepción es que la salud entonces, no solamente, tiene que ver con los hábitos que afectan negativamente a la salud, como podrían ser la dieta pobre en proteínas y nutrientes, la falta de ejercicio, el consumo de drogas o alcohol, sino que también incluiría a los pensamientos, sentimientos y estilo en general .Es decir que también ellos  son considerados como requisitos para lograr dicho bienestar.

 

Teniendo en cuenta ésta concepción es que entendemos que los factores afectivos pueden inferir de manera importante en la salud biológica, como así también la afección corporal puede causar cambios en la conducta, como  la depresión, variable tan reiterativa del estado de ánimo en los últimos tiempos.

 

Es por ello, que quizás las consultas psicologías, han crecido significativamente en los últimos años y hoy constituye una opción ante el constante malestar que la cultura nos impone como realidad cotidiana.

 

Considero que esta apertura es muy favorable para detectar conflictos y trabajar desde todas las áreas interdiciplinariamante. En este sentido creo que este crecimiento científico puede solucionar de raíz ciertas problemáticas.

 

Por estos días debido a la noticia de la enfermedad de la señora presidenta, se hicieron más visibles en la esfera pública las dos grandes posturas sobre el tema. Por un lado, la mirada más ortodoxas y por el otro las más contemporáneas e inclusivas. El debate y tal vez por qué no el avance, se centre en que en otros tiempos no hubiese sido una opción considerable la idea de que la presidenta pueda estar afectada producto del duelo que sigue atravesando frete a la pérdida de su marido y compañero de vida, o al hecho de gobernar y las consecuencias del ejercicio del poder. Su problema hubiese sido reducido simplemente a una falla de lo corporal.

 

Esta noticia deja abierta la posibilidad de cuestionarnos y preguntarnos si lo afectivo/psicológico puede influir, determinar o no ser considerado ante una enfermedad biológica. Desde mi posición y teniendo principalmente en cuenta  la experiencia que el consultorio me brinda creo que los estados de ánimo influyen de manera muy decisiva en el estado de salud biológico, sin que ello fuera determinante

 

Valeria Edelsztein, la investigadora del Conicet que cuestionó el ajuste en el sistema científico frente al presidente del organismo. 
Javier Milei, en cadena: relato anticasta para todo el país.

También te puede interesar