El ministro de Economía, Toto Caputo, se apresta a cumplir su promesa de bajar diez puntos porcentuales el impuesto PAÍS, que él mismo subió al inicio de la gestión. El anunció inminente provoca ansiedad en el empresariado y dudas en los mercados sobre cómo impactará la medida en las reservas del Banco Central y en las cuentas fiscales.
Fuentes de la Casa Rosada confirmaron este martes que el gravamen se reducirá del 17,5% al 7,5% en los primeros días de septiembre.
Hasta ahora, el alcance de la medida aplicaría sólo para las empresas que importan bienes del exterior. La decisión tendría un impacto fuerte en los precios de productos de consumo y ayudaría a bajar la inflación, que es el objetivo prioritario del presidente Javier Milei.
En un contexto de menor oferta por estacionalidad y escasez de dólares en las arcas del Banco Central, en la City porteña temen que un tipo de cambio más barato para las importaciones, genere un aluvión en la demanda del mercado oficial.
Dudas en los mercados
"Los operadores se encuentran atentos a la dinámica de septiembre a partir de la reducción del impuesto PAIS. Se anticipa que podría venir acompañada de una interrupción de las compras que viene hilando este mes el BCRA, en caso de activarse un repunte en las importaciones que podría volver a ejercer mayor presión en las reservas", explicó el analista financiero Gustavo Ber.
El equipo económico buscan disipar las especulaciones. "En este momento la mayoría de las importaciones se pagan en dos cuotas a 30 y 60 días. O sea, las importaciones que ocurran en septiembre post rebaja en el impuesto PAIS las veremos en el MULC en octubre y noviembre", explicó una voz oficial a Letra P.
Para estos meses, el Gobierno apuesta robustecer las reservas brutas con el blanqueo de capitales; al tiempo que Caputo ya habrá empezado su gira por Arabia Saudita para promocionar el RIGI y estimular las inversiones.
Otro factor que tensionará será el cambio de esquema de pagos que flexibilizó el Central un mes atrás, cuando modificó de cuatro a dos las cuotas en las que se abonan las compras al exterior y que empieza a impactar esta semana.
"En términos relativos, durante el próximo mes la demanda de divisas en el mercado oficial para pagos de importaciones superaría el 150% de los devengamientos", estimó el bróker Consultatio y precisó: "El Banco Central deberá entregar en octubre casi el doble de dólares para importaciones que los que entregó en junio".
En qué difiere bajarlo el día 1
En el Palacio de Hacienda no confirman que el impuesto se reduzca el día 1 o cualquier otro día. No da lo mismo la fecha ni para Caputo ni para los importadores.
Reducirlo desde el inicio del mes le daría a Caputo la credibilidad que necesita para fortalecerse políticamente en momentos en los que necesita la confianza del mercado de su lado. Además, tener un día de recaudación o los 30 días del mes hace la diferencia.
El impuesto PAIS es el tributo que más recauda y que, por el lado de los ingresos, sostuvo las cuentas fiscales durante los meses de recesión y fue clave para el superávit fiscal. Sólo en julio tuvo un aumento del 193,58% en términos reales y de acuerdo con el director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), Nadin Argarañaz, es el responsable del 6,3% de la recaudación nacional.
Para las empresas, el hecho imponible es la compra de divisas, que es diario. "Cuando se importa se hace un pago a cuenta del impuesto que después va a corresponder cuando se paguen las importaciones. Si se hace el pago a cuenta con el 17,5% y luego el gravamen baja, hay que pedir devolución", explicó el tributarista Sebastián Domínguez.
Un guiño de Toto Caputo al FMI
Según está escrito en el staff report del Fondo Monetario Internacional (FMI), el impuesto PAIS debería eliminarse por completo en diciembre.
Milei y Caputo repitieron en varias ocasiones que cumplirían con esa palabra.
La rebaja del 10% también es una señal al Fondo en momentos en los que se está a punto de terminar con la última revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas en noviembre y que la intención del Gobierno es negociar un nuevo acuerdo que incluya dólares frescos para apuntalar las reservas.