El anuncio del gobierno de Javier Milei de que quiere eliminar las tasas que los municipios cobran con la carga de combustible generó alarma en el intendente de Rosario, Pablo Javkin, que empezó a cobrar una el mes pasado, en su caso para financiar bacheo y pavimentación.
El vocero presidencial Manuel Adorni fue quien apuntó contra los municipios “que intentan cobrar nuevas tasas a través del ticket de combustible”. “Estamos terminando de evaluar todas las alternativas que tenemos para que esto deje de ocurrir. Es un abuso que tiene cautiva a la gente para cobrarles una tasa municipal que nada tiene que ver con la carga de combustible y que deja atada a la gente a tener que abonarla compulsivamente”, sostuvo.
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Pablo Javkin al borde del offside
El mensaje encaja a medida del mandatario rosarino, que hace menos de un mes aplica el 1,6 por ciento del valor neto (sin impuestos) de cada litro de combustible expendido. Ante la falta de precisiones, en la municipalidad de Rosario quieren creer que es un planteo dirigido puntualmente al conurbano bonaerense, donde también reciben recursos del impuesto nacional a los combustibles.
En el gobierno rosarino no van a polemizar por el momento, excepto que Javier Milei avance contra la tasa. Una medida así desfinanciaría a la ciudad, que todavía ni siquiera percibió la primera recaudación en cuestión.
En este sentido, tras el anuncio de Adorni en el Palacio de los Leones se preguntaban cuál sería el acto administrativo con el que la Nación podría avanzar sobre una potestad ajena. "¿Ir a la Justicia?", dicen con poco crédito. Igualmente dicen estar en "alerta".
El reclamo
El lunes pasado el ministro de Interior, Guillermo Francos, participó en Rosario de una reunión con intendentes de todo el país la que le expusieron la necesidad de que se coparticipe el impuesto a los combustibles, que también se recauda en cada litro de combustible que se carga, y que su distribución no sea exclusiva para el AMBA. El objetivo de las ciudades del interior es poder cubrir el agujero fiscal que les dejó la quita de los subsidios al transporte.
“No nos preocupan los 11 pesos por litro que quedan en Rosario, nos preocupan los 200 o 300 pesos que van a un lugar donde nunca recibimos nada”, repite el intendente de Rosario, en relación a la carga impositiva de los combustibles.
Si la Nación terminase accediendo al pedido y coparticipa el impuesto al combustible, a Rosario no le quedará otra que ceder para no tener dos ingresos por expendio como sucede con los municipios que critica el Gobierno y también Javkin. "Se revisará en su momento, pero ahora no nos podemos quedar sin herramientas", aclararon.
Javkin consiguió que el Concejo le aprobara la tasa vial en diciembre pasado, que se aplica en cada carga de combustible y tiene destino específico: mantenimiento de calles. De inmediato los municipios del Gran Rosario empezaron a replicar este mecanismo de recaudación que sirve de parche en épocas de vacas flacas.