El gobernador electo de Neuquén, Rolando Figueroa, se subió el lunes al escenario de los petroleros en Rincón de los Sauces y selló su apoyo a la intendenta del Movimiento Popular Neuquino (MPN), Norma Sepúlveda, quien competirá por su reelección el próximo 3 de septiembre. ¿Vuelve a casa el rebelde y federal que en abril venció la hegemonía de 60 años del partido?
El mandatario da cada vez más señales de acercamiento al todavía oficialismo, pero no tiene intenciones de regresar a ningún lado. Cada vez que surge la pregunta, la respuesta es la misma: quiere armar algo nuevo porque, en su análisis, que alimentó el sorpresivo triunfo de Javier Milei en las PASO, “por lo menos por un tiempo” la gente no votará más sellos, sino liderazgos.
¿Por qué querría volver a usar el nombre de un partido que viene de perder las provinciales, dos elecciones municipales y que cosechó menos que el voto en blanco en las primarias del domingo?
Exintendenta de Loncopué, cobró notoriedad al calor del gutierrismo cuando asumió su banca en 2019 y fue elegida vicepresidenta primera de la Legislatura. Nunca tuvo la venia de Jorge Sapag (hay quienes atribuyen que a su conservadurismo católico no le cae bien que la dirigenta esté casada con la jueza de paz de su localidad) y en la lista para la Legislatura de 2023 la ubicaron en el puesto 13. Es decir, quedó afuera.
Según se comunicó oficialmente sobre el encuentro en Aluminé, Figueroa valoró que tantas figuras tomen la iniciativa de trabajar en conjunto por la provincia, “sin tener que pedir permiso a nadie”.
Para los intendentes, el buen vínculo con el gobierno provincial que viene se explica no solamente por la necesidad de garantizarle financiamiento a sus municipios, sino también por la búsqueda de liderazgos tras el vacío que generó en el MPN la derrota de abril.
Ninguna de estas preocupaciones alcanza al intendente de la capital, Mariano Gaido, quien recursos tiene y protagonismo propio también. El dirigente pareciera ser, hasta el momento, el último resorte de resistencia en el partido provincial, que cada día le abre más los brazos a Figueroa.
La caída en las PASO
El MPN obtuvo en las primarias del domingo un 9%, poco más de 34.000 votos según el recuento provisorio. Es una performance catastrófica si se tiene en cuenta que el partido tiene 93.000 personas afiliadas y en las presidenciales de 2019 había cosechado más de 75.000 adhesiones.
“Todos lo pusieron mal: el partido no quedó cuarto, quedó quinto atrás del voto en blanco y Sandro Badilla quedó sexto”, reflexionó fuera de cámaras Figueroa el lunes posterior a las PASO.
Hasta el momento, no ha habido señales sobre la posibilidad de retirar la lista de la competencia de octubre, sino que el gobernador Omar Gutiérrez salió a decir sobre el resultado que “fue más que aceptable” y todavía hay “mucho por crecer”. Como ocurre en cada elección nacional, donde el MPN compite con boleta corta, aseguraron que hubo muchos votos que estaban direccionados a su lista, pero terminaron como nulos por la dificultad de combinar correctamente con la opción presidencial.
Petroleros, adentro
La dirigencia del sector petrolero del MPN hizo las exclamaciones de rigor cuando el ahora gobernador electo definió competir por fuera del partido en las elecciones provinciales del 16 de abril. “Traidor” fue de los adjetivos más usados por dirigentes como Guillermo Pereyra y Marcelo Rucci, los líderes de la agrupación interna Azul y Blanca, pero Figueroa sabía de antemano que ese rechazo no iba a persistir si resultaba ganador. “Los petroleros se vienen conmigo”, había pronosticado a su equipo muy temprano en la campaña y hoy los hechos parecen darle la razón.
El gobernador devolvió las gentilezas lanzadas por el sector ni bien pasada la elección con una decisión que le costó dejar afuera a uno de sus dirigentes más prometedores para dar vía libre a la reelección de Norma Sepúlveda, una apadrinada de los petroleros, en Rincón de los Sauces.
En la asamblea del sindicato de la que participó esta semana en la localidad anunció públicamente su respaldo a la jefa comunal y se comprometió a “brindarles las soluciones que necesita Rincón de los Sauces y Vaca Muerta”.
Casi en paralelo, el médico Walter Erdozain, quien integra los equipos de Figueroa y había perfilado como el postulante para darle pelea al MPN en la ciudad petrolera, publicó en sus redes: “Yo sigo lamentando no poder participar en estas elecciones. Me imagino y sueño un municipio con cuentas claras que muestre a los vecinos cómo y en qué se gastan los recursos de los contribuyentes”.
A Erdozain el gobernador electo le “recomendó” prepararse más y presentarse recién en 2027.