TRELEW (Enviado especial) Se hizo lunes en Chubut y no había un formal gobernador electo, aunque los resultados oficiales del Tribunal Electoral le daban la victoria a Ignacio Torres, el candidato de Juntos por el Cambio. Ya se escribió en Letra P: la trayectoria de Torres parecía marcada para seguir acumulando paciencia. Bien entrada la madruigada, con el 100% de las mesas escrutadas, el escrutinio provisorio arrojó una victoria opositora ajustada: la diferencia fue de 1,6 punto porcentual.
El joven senador terminó con 20 años sucesivos de gobiernos justicialistas, aunque el candidato peronista Juan Pablo Luque no la da por perdida: poco antes de la medianoche dijo que la definición recién se conocerá en el escrutinio definitivo y dijo que, según sus números, ganaba por 800 votos. El radical que es candidato a vicegobernador por JxC, Gustavo Menna, dio otros números: dijo que la oposición ganaba por 5.000 votos. Estaba bien orientado: la diferencia fue de 5.229 sufragios.
El impacto nacional de la elección forzó el viaje de los precandidatos presidenciales del PRO, que tuvieron un cara a cara con el viento y el frío de la Patagonia, porque pasada la medianoche les tocó salir al escenario al aire libre que se armó en el búnker opositor en Trelew. La foto victoriosa de la “unidad” de Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich parece mufada: en Córdoba fue una derrota, en este caso el festejo quedaba atragantado por un cierre cabeza a cabeza.
Aunque contenida, hubo fiesta porque el mapa extendía sus zonas amarillas: JxC ubica a Chubut en el mismo listado en que ya están San Juan y San Luis y tiene la esperanza, a partir de lo que ocurrió en las primarias, de que en la misma senda vayan Chaco y Santa Fe.
Con los números al cuello
El viento de cambio que sopló en la provincia no alcanzó para que Torres ganara cómodo, como esperaba en la previa según algunas encuestas, pero, como arrasó en Trelew y ganó en más de una decena de comunas vitales, logró superar al oficialismo de acuerdo a las cifras oficiales: escrutado el 100%, Juntos por el Cambio obtuvo el 35,71%, con 116.432 votos, y Arriba Chubut el 34,11% (111.203 sufragios). Completaron César Treffinger-Laura Mirantes (PLICH) con 13,18% (42.969); Emilse Saavedra-María Rusconi (Frente de Izquierda) con el 4,29% (13.918) y Oscar Petersen-Nancy Lobos con el 2,27% (7.299). Hubo un 10,23% de votos en blanco o anulados
Nacho Torres y la dirigencia nacional acusaron al justicialismo de ser “tramposo y mentiroso” y denunciaron la “vergüenza” del Tribunal Electoral. Luque no aceptó la derrota y tiró la pelota afuera, o para adelante, después de que las dudas aparecieran también en JxC: la primera carga de datos oficiales le daba a la oposición más de nueve puntos de ventaja, pasadas las 21, y eso disparó la euforia, pero después empezó una remontada incesante que terminó emparejando las cosas.
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Para colmo, ni Torres ni Bullrich ni Larreta aparecían en público. En medio de esas dudas, el candidato a vicegobernador salió con un mensaje esperanzador pero poco contundente, en el que tampoco se declaraba ganador.
Eso animó la aparición de Luque instalando más incertidumbres. El peronismo sabía que la tenía cuesta arriba: Luque hizo campaña distanciándose del gobernador Mariano Arcioni y acusándolo, en el final de la campaña, de que Chubut “no tuvo un gobierno peronista” durante los últimos seis años. El Operativo Despegue no le fue suficiente, en medio de una crisis que a los problemas económicos nacionales suma obstáculos locales como el endeudamiento de la provincia, el permanente conflicto educativo y las quejas por la inseguridad.
Peleas locales
El peronismo hizo pata ancha en Comodoro Rivadavia, pero la ventaja que obtuvo no fue suficiente para garantizarle la victoria en el resto de la provincia. La furiosa tormenta del sábado incidió en la participación del electorado, que en toda la provincia resultó baja pero tampoco de modo notable: votó casi el 68% del padrón.
Juntos por el Cambio tuvo dos estrategias de valor para estar a la altura incluso en la ciudad más poblada, que se descontaba un bastión oficialista: la positiva tracción de su candidata a intendenta Ana Clara Romero, de todos modos derrotada por Othar Macharashvili por cinco puntos de diferencia, y el pacto que Torres hizo con el sindicalista del petróleo Jorge Ávila.
En Trelew, JxC ganó caminando, tal como anticipó la elección por la intendencia durante el mes de abril, cuando la victoria de Gerardo Merino fue aperitivo del batacazo de Torres. En ese territorio se forjó la victoria, pero además el proceso de construcción de ese espacio político al que Nacho caracteriza como un “movimiento ciudadano”.
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La otra carrada de votos para sumar a la provincial vino de Rawson, capital administrativa de la provincia, donde fue reelecto el radical Damián Biss, quien en algún momento hizo el amague de disputar una interna con Torres, pero dio un paso al costado y se dedicó a revalidar su dominio del pago chico. Maxi Valle ocupó el segundo lugar en esa comuna y fue sorpresa: compitió sin boleta para la categoría de la gobernación.
Completaron el despliegue amarillo las victorias en Esquel y El Hoyo, donde fueron electos intendentes Matías Taccetta y César Salamín, respectivamente. Hubo más: Mariel Peralta será la primera intendenta mujer de Rada Tilly, Darío James fue reelecto en Gaiman y Jorge Perversi ganó en Puerto Pirámides.
Un peronista que salvó la ropa fue el intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre, hermano del vicegobernador y candidato a la reelección, Ricardo Sastre. El postulante a jefe comunal derrotado fue Daniel Laudonio. En 28 de Julio, “Arriba Chubut” dio un golpe joven: Luka Jones es el nuevo jefe comunal.
César Treffinger, “el tercero en discordia”, cosechó un porcentaje algo menor al que lo puso en el centro de la escena en las legislativas de 2021. En una elección polarizada, ese guarismo que lo posiciona como una tercera fuerza pasó algo desapercibido, aunque el espacio de Javier Milei cosechó uno de sus primeros gobiernos comunales en el país: Walter Jara fue el más votado y gobernará la comuna rural sureña de Buen Pasto.
Otra curiosidad se dio en el pueblo de Tecka, donde hubo un solo postulante, que fue electo, pero con menos adhesiones que los votos en blanco: Jorge Seitune lleva 24 años gobernando y fue reelecto con 416 sufragios. Hubo 469 en blanco.