Pese al silencio del presidente Javier Milei, que hasta la entrevista de este miércoles por la noche se limitó a opinar a través de compartir tuits ajenos, numerosos funcionarios salieron a defenderse de las críticas de Cristina Fernández de Kirchner. Si bien en la Casa Rosada intentaron bajarle el precio al documento de 33 páginas, y negaron cualquier tipo de estrategia coordinada, por un rato el gabinete logró dejar atrás sus diferencias y salió en bloque a cruzar a la exmandataria, en medio del ruido de la eventual fusión del PRO-LLA.
"Cada uno de los funcionarios que salieron a hablar lo hizo por motus propio, no hubo ningún tipo de orden al respecto", aclaró a Letra P una fuente al tanto de la agenda del jefe de Estado.
Con esta declaración en off the record, la Casa Rosada no sólo desestimó cualquier tipo de bajada de línea política para defender al oficialismo de las críticas de la expresidenta, sino también que intentó quitarle protagonismo al texto con que ella decidió reaparecer y que tomó rápidamente relevancia en el debate público por sus menciones sobre la "tercera crisis de deuda", el "ajuste feroz" y el "caos planificado".
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"La carta no nos conviene, ni nos deja de convenir, simplemente hubo una decisión de ella (por Cristina) de atacarnos", amplió el mismo funcionario con despacho en la sede de gobierno, lo que de alguna forma marida bien con el silencio que por estas horas decidió mantener el Presidente al regreso de su viaje al Vaticano. De todos modos, hay expectativas alrededor de la entrevista que Milei dará este miércoles a las 21, en la que se espera que brinde su opinión sobre la carta de CFK.
De hecho, al cierre de esta nota, Milei sólo había reaccionado a través de su cuenta de Twitter al extenso análisis político y económico de la expresidenta, con un posteo del consultor Alfredo Romano: "La dolarización es el único camino para evitar (en parte) los desmanes del populismo argentino".
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Guillermo Francos, ministro de Interior de Javier Milei.
Respuestas a Cristina Fernández de Kirchner
Quienes sí salieron rápidamente a cruzar a Fernández de Kirchner fueron algunas de las principales espadas políticas de la Casa Rosada, como los ministros de Interior, Guillermo Francos, y de Economía, Toto Caputo, uno de los principales aludidos en el documento, además de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. "El documento es surrealista, plantea algo en donde no hace ninguna autocrítica de lo que fueron sus 16 años de en el poder. La gente entiende perfectamente dónde están las responsabilidades de lo que ha pasado en la Argentina en los últimos 20 años", sostuvo Francos.
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El dato distintivo es que a este coro libertario se sumaron las voces amarillas aliadas de La Libertad Avanza (LLA), algunas de las cuales suenan con posibilidades de pasarse a las filas del oficialismo, como la del diputado Diego Santilli. También le reprochó la carta la exgobernadora María Eugenia Vidal.
De esta forma, pese a los ruidos internos en el gobierno de los últimos días, motivados por los fracasos políticos alrededor del debate de la ley ómnibus y por la presión de un sector del PRO de llegar a algún tipo de acuerdo de gobernabilidad, los principales funcionarios de la administración libertaria utilizaron un lenguaje similar para cruzar a la expresidenta y defender a Milei en el inicio de su gestión.
