Horacio Rodríguez Larreta sigue dando pasos de cara a su proyecto presidencial de 2023. Realizó una gira por el interior, con viajes a Córdoba y Corrientes, visitó Europa, donde se mostró en modo candidato, y en los últimos meses sumó a su ecosistema a dirigentes identificados con los halcones PRO, sus rivales en la carrera a la Casa Rosada.
Una de las últimas incorporaciones del alcalde es Gabriela Ricardes, quien construyó su carrera en la función pública al lado de Hernán Lombardi, y fue designada para estar al frente del Complejo Teatral Buenos Aires, en reemplazo de Jorge Telerman. Socióloga y gestora cultural, trabajó en el Ministerio de Cultura de la Ciudad cuando Mauricio Macri fue jefe de Gobierno, y en la secretaría de Contenidos Públicos de la Nación, bajo la jefatura de Lombardi.
Precisamente, el actual diputado del PRO es uno de los hombres de mayor confianza de Macri, con diálogo asiduo, y además uno de los que pide a viva voz que el expresidente salga a la cancha a jugar un segundo tiempo. Nunca terminó de comulgar con Larreta y cuenta con un antecedente que lo delata: en 2015, en la interna entre el actual líder de Uspallata y Gabriela Michetti, apostó por la entonces senadora nacional del espacio amarillo.
Larreta también movió para que Florencia Arietto, la abogada penalista identificada con Patricia Bullrich, se adhiera al armado bonaerense del PRO dedicado a consolidar la candidatura de Diego Santilli. La letrada, que tuvo como misión combatir a la barrabrava de Independiente en la presidencia de Javier Cantero, se sumó al operativo clamor al afirmar que el exministro porteño “es el mejor candidato para gobernar la provincia", al tiempo que minimizó su alejamiento del redil de la exministra de Cambiemos. “No pasó nada, Patricia es la presidenta del PRO y yo estoy yendo con el candidato del PRO que ganó las elecciones con el PJ Republicano a trabajar en la provincia. Lo último que hay que hacer en la provincia para entrar es internismo. Nosotros tenemos que trabajar todos juntos”, consideró.
A su turno, Santilli le devolvió los elogios: "Estamos trabajando en la construcción de una alternativa republicana, federal, amplia y moderna. La incorporación de Florencia es una enorme alegría para nosotros, por su compromiso, vocación pública y voluntad política de empezar a transformar la provincia de Buenos Aires y la Argentina".
La relación entre los principales referentes de la fuerza amarilla fluctúa entre la tensión y la necesidad. Saben que deben convivir bajo el esquema de unidad que pregona Juntos por el Cambio, sobre todo ante lo que sucede con el Frente de Todos, pero los dos aspiran a quedarse con la postulación a la Casa Rosada. El alcalde, este martes, decidió participar del seminario contra el narcotráfico que organizó la alianza opositora en Parque Norte, un evento a la medida de la exministra, pero evitó cruzarse con ella, que en los últimos días reconoció que el vínculo no pasa por su mejor momento.
“No me quiero detener en pensar qué le pasó a Horacio; por qué tiene una relación cortada conmigo”, confesó Bullrich. Y resaltó la figura de Macri: “está más abierto a discutir ese futuro, quizás con una libertad mayor para poder plantear aquellas cosas que cree, que piensa, que siente, y eso le da a JxC y a todos nosotros una referencia respecto de a dónde vamos a ir”.