Iván Tobar, “El General” que tiene quien lo banque
El dirigente teje en la periferia de la capital. Del tablón de Estudiantes al andamio. Quién es y qué poder tiene el emergente que se le anima al Pata Medina.
Iván Tobar nació hace 40 años en la localidad ensenadense de Villa Catella, donde se crio y comenzó a formarse como dirigente gremial. Desde adolescente organizaba a los vecinos para reclamos locales. “Siempre que veo una injusticia me meto, no sé por qué, pero es más fuerte que yo”, narra siempre en su círculo íntimo. De cuna humilde, describe a su barrio con nostalgia pese a que lo visita todas las semanas. “Cuando nací había zanjas, era un barrio muy decaído pero desde que llegó Mario Secco hubo un cambio total no solo ahí sino en toda Ensenada”, señala en su fortaleza gremial de Tolosa, donde fue bautizado como “El General” y busca desplazar al histórico dirigente de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) seccional La Plata, Juan Pablo Medina.
Registrate para continuar leyendo y disfrutando de más contenidos de LETRA P.
Desde 1999 hasta 2002 fue delegado en Carrefour. Renunció y trabajo en una pizzería de la que fue propietario. Luego fue empleado en el Mercado Central de La Plata. En 2016 se sumó a la Unión de Obreros Constructores de la República Argentina (UOCRA) La Plata. Cansado de seguir órdenes, formó la agrupación gremial Blanca y Azul junto a sus compañeros de base con la que quieren disputarle el poder sindical al medinismo.
Su centro de comando está en 526 entre 23 y 24, corazón de la localidad de Tolosa. Tiene una oficina en la que exhibe fotos de Néstor Kirchner y otros dirigentes. Desde ahí también parte ayuda para una red de ollas populares en La Plata, Berisso y Ensenada. Son más de 130 comedores que asisten a más de dos mil personas. Mientras afina su maquinaria territorial, mandó un mensaje al mundo político: “Vamos a jugar en todos los ámbitos”. Para eso planea “revitalizar las unidades básicas". "Todos se olvidaron de las básicas, que son donde están las raíces peronistas”, dice. Además, ya funcionan las ramas femeninas de UOCRA y la social con la que construyen plazas con canchas de fútbol infantil en las barriadas más alejadas del centro y del asfalto de la capital bonaerense “donde los políticos no van”, resalta.
Demostró su poder de fuego y convocatoria durante el mes de junio de 2021: encabezó una masiva marcha a la sede del fuero Federal de La Plata donde denunció formalmente (presentó fotos, audios y videos) que sus rivales gremiales (Medina y su hijo Cristian Medina) violaron las condiciones que prometieron respetar en sede judicial para salir de prisión, tras su detención y procesamiento por varios delitos, causas de las que pocas quedan en curso. “Los policías nos felicitaron, no rompimos ni un espejito, venimos a cambiar la UOCRA”, dijo tras la movilización. También amagó con un “ollazo popular” para mostrar la realidad de la periferia en la capital provincial, pero esa actividad fue desactivada luego de un llamado del gobierno provincial.
De la tribuna al andamio
Tobar sabe que tiene un pasado ligado a la violencia, no lo esconde y da sus argumentos. Desde su agrupación denominada Los Leales llegó a liderar la barra de Estudiantes de La Plata tras feroces enfrentamientos con su antecesor, el expolicía Fabián Gianotta, quien purgó una condena por homicidio. “Soy fanático de Estudiantes, el corazón lo tengo ahí, dejé y dejo todo por Estudiantes. No me considero un barrabrava, sí un barra; la parte brava la dejamos de lado. Lo demostramos desde que armamos la agrupación y decidimos sacar a lo que le hacía mal a Estudiantes. El club se merecía otra gente. En las tribunas hubo de todo, la familia no iba a la cancha. No me gusta la desigualdad. Siempre pagué mi cuota de socio”, aclaró.
Su liderazgo le valió que le aplicaran el derecho de admisión en los estadios de fútbol de la provincia de Buenos Aires. Estuvo detenido y acusado por el intento de homicidio de Gustavo Mastrovitto, exlugarteniente de Gianotta. “En 2006 no podíamos entrar a la cancha, lo hicimos en 2009. En 2010 nos quedamos firmes. Somos una familia, queremos mostrar lo bueno. Hicimos escuela, hoy te piden una foto con el gorrito o la bandera de Los Leales. Hace más de dos años que no voy a la cancha. Fui a la inauguración, a un par de partidos más y listo. Estoy en otra etapa, pasa el tiempo, empiezo a disfrutar de mis hijos, empezamos a ver las cosas de otra manera. Estudiantes no nos necesitaba más a nosotros. Todos entran con sus banderas, ahí no hay barras bravas. Inculcamos la familia, que todos somos uno. Queremos lo mejor para Estudiantes. Se vio en los últimos diez años. Somos distintos, somos una familia. Eso es lo que transmití en la UOCRA”, sostiene.
Aunque no es la conducción formal del gremio, se comporta como tal. La foto actual muestra a la UOCRA La Plata en proceso de normalización. Con el delegado interventor Tobar tiene una aceitada relación y hasta comparten oficinas en pleno centro de la capital bonaerense. La elección para las nuevas autoridades gremiales aun no tienen fecha cierta. Mientras eso se define, Tobar ya anunció que está listo para ir a la batalla electoral. Asegura tener el apoyo de "más de cinco mil afiliados”.
Otras de las muestras de su poder territorial la dio en el verano 2020, cuando se especulaba con el regreso de Medina a la conducción gremial sin elecciones. Rápido de reflejos, Tobar y su equipo allanaron el desembarco del gremio rival Sitraic. Se registró un éxodo de afiliados. Esa situación encendió las luces de alarma en la sede nacional de UOCRA. Hubo una reunión, se detuvo el pase de afiliaciones y comenzaron los regresos. “Fue una picardía que hicimos, herramienta política para mostrar que los trabajadores están con nosotros”, confirmó Tobar.
Línea nacional
Mientras se reconfigura el mapa nacional del sindicalismo y la conducción federal de la Confederación General de Trabajadores (CGT) de la República Argentina das sus primeros pasos tras la reunificación, el mapa gremial de la capital bonaerense parece un espejo. Fuentes de la Agrupación Blanca y Azul expresaron su apoyo al dirigente nacional Gerardo Martínez. En ese sentido, Tobar señaló que apoya a Martínez, quien “durante toda su trayectoria demostró estar en la defensa irrestricta de los derechos de trabajadoras y trabajadores”.
Iván Tobar con una maqueta del auto Justicialista Grand Sport
Este posicionamiento es novedoso para el mundo laboral de La Plata, Berisso y Ensenada. Medina siempre estuvo enfrentado a las conducciones nacional y local de la CGT. La nueva agrupación también se diferencia del medinismo y Tobar no duda en sumarse a las filas de los espacios del clima gremial que impulsa la llegada de Martínez a la CGT: “Es un dirigente gremial con reconocimiento internacional, es muy respetado en la Organización Internacional del Trabajo y no ve a los empresarios como enemigos”, señaló.