ELECCIONES 2023

Michlig, el armador desarmado del frente de frentes

El presidente de la UCR santafesina se puso al hombro la alquimia de la alianza opositora, pero el tiempo pasa y nadie pone el gancho.

ROSARIO (Corresponsalía Santa Fe) El senador provincial del Nuevo Espacio Organizado (NEO) y presidente de la UCR santafesina, Felipe Michlig, analiza los pasos para entender por qué se le escurre la construcción del frente de frentes opositor para destronar al peronismo de la gobernación. Las garantías numéricas que pone en la mesa para la victoria parecen irrefutables, pero así y todo el resto de los espacios le da, por ahora, la espalda al acuerdo electoral.

 

Michlig saboreó las mieles de las últimas elecciones en las que el radicalismo ganó y su candidato a senador Maximiliano Pullaro quedó a tiro de la ganadora Carolina Losada, incluso por encima del PRO. Desde entonces, y envalentonado con los resultados, entendió con sus correligionarios que era la hora señalada para que la UCR gobierne la provincia a partir de 2023. 

 

Pero para gobernar, el partido debía empuñar una herramienta electoral poderosa que encontró razón en un hipotético frente de frentes con el resto de los radicales, el PRO, el socialismo, y el partido del intendente de Rosario, Pablo Javkin. Agrupar y liderar el espacio no peronista, la meta intermedia. El paso previo para tener músculo y poder de convicción fue hacerse de la conducción del Comité de la UCR de Santa Fe. Lo logró, después de limar asperezas internas, y Michlig empuñó la presidencia. 

 

Sin embargo, la idea de avanzar en un acuerdo programático implica un sinfín de negociaciones entre los distintos partidos, algunos ávidos de poder, otros con necesidad de revancha, algunos para completar la foto y hasta hay quienes buscan una estructura para salvarse el pellejo. Es decir, intereses cruzados por todos lados. Es ahí donde se le resbala el armado al senador y también donde justifica la falencia: dudas e internas hacia el interior de los otros partidos.  

 

“Sacamos muchos obstáculos, no terminamos aún el trayecto”, resalta a Letra P Michlig. Si el artefacto electoral parece estar condenado al éxito -al menos las encuestas lo indican-, si la idea promueve la amplitud política tan perseguida, y si del otro lado no ponen demasiado para mantener el cetro, algo falla en el sistema operativo desde donde se envían las directivas. 

 

Con un perfil moderado en el discurso y años en la política santafesina, Michlig intentó unir las partes y pensó tener listo el frente de frentes para esta altura, pero parece estar más lejos que nunca. Argumentan en su entorno que el atraso de las elecciones provinciales sumó para no poder abrochar la alianza antes de fin de año. Entre otras cosas, podría aclararse.

 

Hasta hace un par de meses, confiado y algo precipitado, probablemente por las ganas de poner en marcha semejante máquina, Michlig aseguraba que el frente de frentes era cuestión de semanas por haber acercado a las partes indecisas. Contaba adentro al socialismo, también al PRO más allá de las idas y vueltas de Federico Angelini, armador del partido en Santa Fe, y al intendente Javkin. Ni hablar del radicalismo que encabeza Julián Galdeano, armador de Carolina Losada. Mucha trama para la novela. 

 

Sin embargo, a menos de dos meses de terminar el año -y con un mundial de fútbol en el medio-, ninguno de los espacios estamparon la firma final ni el NEO se impuso como líder excluyente. Nunca llegaron a ser socios, solo aliados de un proyecto sin inscripción. Y no es que está al caer el acuerdo: no lo compran con este diseño o hasta desconfían de las condiciones. Tan cerca, pero tan lejos, en ese punto aturde la malograda gestión radical.   

 

“Hay mucha ansiedad en algunos, pareciera que tuvieran las elecciones provinciales el día de Navidad”, lanzó Galdeano en una entrevista con Letra P. Michlig suele decir que no se suben al triunfalismo que los habilitaría a meter de prepo al resto, pero que no hay más margen para especulaciones. De aquellas charlas y fotos donde descontaban formar parte de una PASO competitiva a realizar una contracumbre todos los espacios menos el NEO en el Concejo de Rosario en una contestación a los modos de construir. El NEO entiende que aún hay tiempo con el atraso de las elecciones y confía en la estructura propia lograda en caso de naufragar definitivamente el frente de frentes.

 

Hay una cuenta regresiva que resuena en la cabeza del presidente de la UCR: el año que viene se cumplirán 60 años desde que asumió el último radical al mando de la provincia. Se le suma un desafío que le aprieta el zapato: esta vez, como está dado el escenario, no se le puede escapar la gobernación y quedar de nuevo como furgón de cola.

 

Norma López, Lisandro Cavatorta, Julia Irigoitia deberán renovar sus bancas en el Concejo de Rosario. En la foto, junto a Mariano Romero y María Fernanda Rey. 
El PRO de Santa Fe se desarma y sangra.

También te puede interesar