El presidente Alberto Fernández se refirió a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por el pago de la deuda externa y aseguró que “el acuerdo no será en base a ningún ajuste”, y aseguró que en esta segunda etapa de su gestión el objetivo será “enfrentar el problema de la pobreza y la exclusión”, al clausurar con su discurso la 27° Conferencia de la Unión Industrial Argentina, que se desarrolló en el centro de exposiciones Parque Norte.
“Nosotros, como ya nos pasó a partir de 2003, afrontaremos las deudas que otros generaron, pero ese acuerdo no será a costa del desarrollo del país ni en base a ningún programa de ajuste”, señaló el mandatario, en alusión a su rol en el gobierno del presidente Néstor Kirchner.
En ese sentido, afirmó que su equipo sigue “negociando con el FMI a paso seguro y con el pulso firme” a fin de “refinanciar los abultadísimos vencimientos de deuda para los próximos tres años a los que se había comprometido el gobierno de Mauricio Macri”.
Frente al empresariado, recordó que la semana próxima habrá una visita de los equipos técnicos del Ministerio de Economía y del Banco Central a Washington “para seguir fortaleciendo estos progresos, que el ministro (Martín) Guzmán supervisará desde Buenos Aires”.
“Le pedimos al FMI que antes de que cerremos un nuevo acuerdo, haga su evaluación de lo que fue el fallido programa Stand-By por el que se desembolsaron 44 mil millones de dólares que se mal utilizaron en pagar deuda insostenible y en financiar salida de capitales. Eso nos va a ayudar a terminar de entendernos, es un paso necesario en este camino”, dijo.
En el inicio de su discurso, el mandatario hizo un repaso de las acciones implementadas durante la pandemia para contener la crisis económica y social, y focalizó luego en la necesidad de lograr el trabajo conjunto entre los sectores productivos y el Estado para avanzar en la generación de empleo y en la recuperación de la economía. Además, anunció la creación de un Plan Productivo 2030 para potenciar a los sectores productivos, las industrias, las exportaciones y generar empleo.
"Mi responsabilidad es trabajar para que la deuda no postergue más el desarrollo argentino. Crecer para cumplir los compromisos asumidos. Cualquier otra lógica solo es una quimera", concluyó.