En la Sexta sección, el sur de la provincia de Buenos Aires, los resultados de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) sorprendieron a triunfadores y derrotados. Fue 52,31% a 27,31%, según el escrutinio definitivo. El Frente de Todos (FdT) preveía una derrota, pero no el golpe que el radicalismo le asestó en las urnas. Juntos esperaba ganar, pero no por tan amplia diferencia. Envalentonada, la dirigencia de la alianza opositora va por más: trabaja para quedarse con ocho de las once bancas en juego. Para eso, debe repetir su performance y procurar que el oficialismo reste, al menos, medio punto.
Como contó Letra P, la manesmanía neutralizó el poder de caciques PRO del interior. Esa situación se dio en la Sexta, donde la nómina amarilla no pudo imponerse a la estructura radical que se ató a la imagen taquillera de Facundo Manes. La propuesta liderada por el presidente del Concejo Deliberante bahiense, Fernando Campagnoni, e impulsada por el intendente Héctor Gay, la senadora Nidia Moirano y el diputado Santiago Nardelli fue superada por el locutor radical locutor Lorenzo Natali, que se impuso por siete puntos y fue, además, la lista más votada.
El margen de triunfo fue tan amplio que sorprendió a la dirigente de uno y otro lado de la grieta. Si en noviembre se repitieran los resultados de septiembre, la oposición se quedaría con siete de las once bancas en juego en la Cámara de Diputados provincial, una más de las que buscaba conservar. El Frente de Todos, en tanto, perdería un lugar en ese recinto.
Natali es locutor y, por su actividad en los medios, una personalidad reconocida en Bahía Blanca, la perla del sur por su potencia electoral. Llegó al espacio convocado por Emilio Monzó y si bien su inexperiencia política había sido cuestionada por sus adversarios internos, su primera incursión en política dejó boquiabiertos a propios y ajenos.
“Si bien sabíamos que nos iba a ir bien porque confiábamos en nuestros candidatos y trabajábamos muy fuerte como para lograr una buena elección, no esperábamos resultados tan buenos como los que finalmente se dieron”, admitió a Letra P el candidato a primer diputado.
También en el Frente de Todos se sorprendieron por los guarismos. “Sabíamos de cierto disgusto de la gente porque no habíamos podido solucionar problema de la economía, pero teníamos expectativas de que nos dieran un voto de confianza entendiendo que no era fácil en medio de una pandemia y después de recibir el país como los recibimos”, indicó a este medio el intendente de Monte Hermoso y candidato a diputado Alejandro Dichiara. Si bien considera que el electorado “castigó” al peronismo, el dirigente no cree que tenga la intención de “volver al macrismo”. “Es un voto más anti que PRO”, evaluó el jefe comunal y señaló que tienen esperanzas de poder “mejorar la elección de la PASO”.
La estrategia del peronismo es volver a la calle, retomar el diálogo cara a cara y las reuniones con los vecinos, además de las visitas de funcionarios nacionales y candidatos. La dirigencia entiende que el escenario es complicado, quizá el más complicado de las últimas elecciones. Quedaron a 24 puntos de Juntos.
Estas expectativas chocan con las aspiraciones de la oposición. Camino al 14-N, el cambiemismo no sólo espera consolidar los números obtenidos sino sumar una banca más, es decir, ocho sobre once en juego. Especula con que el trabajo de campaña que resta lo ayudará a traccionar los votos necesarios y con que el FdT pierda posiciones.
En un territorio hostil para los gobiernos peronistas, la dirigencia analiza que las personas que no fueron a votar podrían encolumnarse detrás de Natali o, incluso, inclinarse más a la derecha; es decir, hacia la propuesta de lidera José Luis Espert y Carolina Piparo y que en la seccional encabeza Guillermo Castello. Si bien Avanza Libertad quedó a unos diez mil votos del piso, en Bahía Blanca no desestiman el crecimiento de la fuerza ante un sostenido inconformismo con las políticas del Gobierno nacional.