La batalla discursiva entre oficialismo y oposición por la campaña de vacunación recrudeció luego de que el intendente de Pergamino, Javier Martínez (PRO), criticara públicamente vía redes sociales la instalación de puestos partidarios donde se informa sobre cómo incribirse para recibir la vacuna contra el coronavirus. En un posteo en Twitter, mostraba un local de Nuevo Encuentro y otro del Frente de Todos de Pergamino, criticando un uso político partidario de la vacuna. Luego de que otros jefes comunales replicaran las críticas, la mesa provincial de Juntos por el Cambio emitió un comunicado en el mismo sentido. El oficialismo intentó quitar trascendencia al tema pero, al mismo tiempo, contraatacó: tildó de “ridículo” el reclamo y mandó a los intendentes a “timbrear” para colaborar con la difusión del operativo de vacunación. El Gobierno trabaja fuertemente en el proceso de inscripción, puesto que hasta el momento sólo hay un millón y medio de anotados y pretende llegar a 12 millones.
Legisladores del bloque de senadores de Juntos por el Cambio hicieron dos pedidos de informes destinados al ministro de Salud, Daniel Gollan. Quieren que explique los criterios y montos establecidos para llevar adelante la campaña de vacunación y la distribución de la vacuna; la cantidad de personal de Salud destinado en cada municipio, la contratación de personal y si fue llevada adelante en forma excepcional sin concursos ni antecedentes.
También piden conocer cuál es el organismo encargado de la distribución de las vacunas, si existen agrupaciones sociales o políticas que estén armando listados para su aplicación, si tienen participación en la distribución y si forman parte de la campaña; además, piden saber si cobran por eso.
En el Gobierno le restan trascendencia al reclamo de los jefes comunales. Solo se trata de puntos de referencia donde se asistirá a personas que no tienen acceso a internet, en las unidades básicas no se aplicará la vacuna, dijeron a este medio fuentes oficiales. “En vez de tirar piedras, podrían sumarse a la campaña y salir a buscar a la gente para que se anote”, contragolpearon cerca del mandatario.
La ministra de Gobierno bonaerense, Teresa García, dijo este viernes que “hay una decisión de la oposición de cargar sobre el miedo de la gente, lo cual se torna muy peligroso, porque el operativo de vacunación está armado y en cabeza de los intendentes”.
En declaraciones vertidas al sitio Que Pasa Web, durante una recorrida por el distrito de Escobar, la funcionaria provincial también sostuvo que desde los puntos de referencia cuestionados por la oposición “están ayudando a que la gente se inscriba. No vacunando, ni haciendo listados. Los vacunadores son y serán los que participaron en otras campañas de vacunación, del ministerio de Salud de la Provincia, de IOMA y de cada municipio. A nadie se le puede ocurrir que va a venir una horda militante a clavarle una jeringa en el brazo a alguien. Me parece ridículo”.
El presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Federico Otermín, también cruzó a la oposición. A través de sus cuentas sociales, recomendó a la dirigencia de Cambiemos “ir a las casas –de quienes no se registraron– a colaborar con la gente que necesita anotarse para vacunarse y no sabe o no puede hacerlo. Sería buenísimo que lo hagan, ¿o ya no tocan más timbre?”, chicaneó en referencia a la modalidad de timbreos de Juntos por el Cambio durante la campaña y cuando fue gobierno.
Comunicado
“No compartimos el uso político, partidario y militante de la campaña de vacunación contra el covid-19 que llevan adelante algunos dirigentes del Frente de Todos, en un proceso que debería ser pura y exclusivamente de responsabilidad estatal en sus tres niveles de gobierno: nacional, provincial y municipal”, lanzó Cambiemos en un comunicado.
Y también cruzó al ministro Carlos Bianco, quien defendió le trabajo en esos puntos de referencia para informar sobre la vacunación. “Consideramos una falta de respeto a la institucionalidad las declaraciones que hizo el jefe de Gabinete bonaerense, apoyando abiertamente este tipo de acciones. No sólo son graves porque atentan contra el rol de las instituciones, sino que también generan confusión en una sociedad en la que es de extrema necesidad llevar claridad y buena información sobre el tema vacunas”.