La intervención urgente del Ministerio de Trabajo evitó que la disputa gremial entre Camioneros y Mercado Libre, la primera de peso durante la cuarenta, llegara a mayores. La gestión hizo las veces de bautismo de fuego del titular de la cartera, Claudio Moroni, en un conflicto que prometía escalar pero se desactivó en tiempo record.
El anuncio, el jueves, del bloqueo por parte del gremio que dirige Hugo Moyano de cinco plantas de distribución de la empresa con mayor valor bursátil del país sacudió las mermadas oficinas de la cartera laboral, pero también puso en alerta a la Casa Rosada en una semana en la que florecieron las internas en el Frente de Todos.
Además, la medida gremial jaqueaba la distribución de la plataforma en un momento de pleno auge de las compras virtuales producto de las restricciones impuestas por el coronavirus.
Como si fuera poco, la previa de la audiencia convocada para la mañana del viernes estuvo macerada por picantes cruces mediáticos entre empresarios y sindicalistas. De hecho, las acusaciones ocuparon buena parte de la reunión que encabezó inicialmente el secretario de Trabajo, Carlos Belloti, que amenazó con hacer naufragar las gestiones oficiales.
La intervención de Moroni encauzó la audiencia y derivó en la apertura de una mesa de diálogo que inicialmente va a funcionar por fuera de los ámbitos oficiales, de manera bilateral entre Mercado Libre y los abogados de Camioneros, con Hugo Moyano hijo. Un hecho que marcó el clima de distensión que se imprimió hacia el fin de la reunión fue que el móvil del canal online del canal de Camioneros, se retiró de la sede laboral de la avenida Callao sin tomar declaraciones de los sindicalistas.
Uno de los puntos de conflictos es el reclamo de encuadramiento gremial del personal de logística de la compañía de Miguel Galperín bajo Convenio Colectivo de Trabajo de 40/89, que reclama reclama el moyanismo. Ese y otros temas, según el acuerdo de este viernes, se van a abordar bajo el monitoreo de la cartera laboral en un encuentro donde Mercado Libre anticipó su decisión de ampliar hacia las provincias sus centros de distribución.