ELECCIONES 2019 | TODOS

Fernández desafía otra vez al Gobierno con la economía: ahora, el dólar

¿Está atrasado, como dice el candidato? Datos e interpretaciones. La paz cambiaria, el mayor activo de la campaña oficial, bajo crítica. La inflación y un peligro en ciernes.

Después de haber generado una polémica fuerte con su propuesta de provocar una baja de las tasas de la deuda de corto plazo del Banco Central con los bancos en caso de llegar a la Casa Rosada, el precandidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, volvió a poner el foco en la cuestión económica y llevó a Gobierno al terreno que más lo complica en la campaña. En declaraciones realizadas a la LN+ el lunes a la noche, volvió a hablar de atraso cambiario y pateó otro avispero del debate económico.

 

 

A la vez que aclaró que con sus dichos no pretende promover una corrida cambiaria, como lo acusaron desde el oficialismo, afirmó que "todos saben que el dólar está subvaluado. Todos los saben. Es un negocio que hace Macri de mantener el dólar planchado para que la gente tenga la sensación de una economía estable, pero la verdad es que el dólar está planchado (porque) la inflación mensual esta arriba del 2,5% " mensual.

 

 

 

El debate volvió a arreciar, aunque, a diferencia de lo ocurrido el lunes, el billete verde operó estable este martes.

 

 

 

El economista Eduardo Hecker, miembro del equipo técnico de Fernández, precisó la postura del precandidato al señalar en diálogo con Letra P que “lo que está claro el que el tipo de cambio actual es resultado de una política de contención del Gobierno a través de altas tasas de interés y de la autorización que le brindó el Fondo Monetario Internacional de intervenir en el mercado después de lo ocurrido en abril”, cuando la divisa amagó con volver a escaparse.

 

“El problema es que esa política, a la que se suma un congelamiento parcial de las tarifas (de servicios públicos), está fijada por las elecciones y por el objetivo de corto plazo de que la inflación no suba más y genere mal humor social”, añadió. “Igual la inflación sigue en niveles exorbitantes, más allá del marco general de recesión y pérdida de puestos de trabajo. El costo social de estas políticas es muy alto”, definió.

 

“En el mandato de Mauricio Macri se fugaron 80 mil millones de dólares, ahorro argentino que se perdió en un proceso financiado con deuda”, reprochó el economista.

 

 

 

Pero, en concreto, ¿el dólar está atrasado? “Más allá de tecnicismos, lo central es que hay una política de contención artificial y de corto plazo. Ese es el punto. Nosotros no vamos a decir cuál debe ser el nivel del tipo de cambio porque esa es una cuestión que deberá manejar el Gobierno hasta que se vaya si pierde las elecciones”, indicó Hecker.

 

En tanto, economistas de diferentes tendencias no vinculados con los candidatos coinciden en que no puede hablarse aún de atraso cambiario, aunque la evolución más veloz de la inflación que del dólar conlleva ese peligro.

 

Leandro Ziccarelli, coordinador del Observatorio Monetario-Financiero del CEPA (Centro de Economía Política Argentina), indicó ante la consulta de este medio que “el dólar no está atrasado, pero está en el límite. Si sigue bajando el tipo de cambio real (ndr: por evolucionar por debajo de la inflación), entonces sí  podríamos empezar a hablar de atraso”.

 

“Todavía lo veo en niveles razonables, aunque la tendencia asuste un poco”, añadió.

 

 

Economistas de diferentes tendencias no vinculados con los candidatos coinciden en que no puede hablarse aún de atraso cambiario, aunque la evolución más veloz de la inflación que del dólar conlleva ese peligro.

 

 

De acuerdo con Ziccarelli, “el Tipo de Cambio Real Multilateral (ndr: que mide al peso en relación con las monedas de los países con los que comercia la Argentina) está hoy en los mismos niveles que cuando el dólar tocó $25 el año pasado, lo que ya implicaba una devaluación del 20%. Creo que ese debería ser un piso; por eso el rebote de la semana pasada y ayer (por el lunes)”.

 

 

 

Christian Buteler, analista financiero, coincidió. “Si uno se basa en el Índice de Tipo de Cambio Multilateral, no está atrasado, aunque obviamente viene cayendo por el avance de la inflación”.

 

“En relación con este tema hay algo muy importante: no podemos vivir siempre devaluando, porque la Argentina es un país muy dependiente del tipo de cambio y eso genera más inflación. Entonces, hay que dejar de mover nominalmente en dólar y atacar la inflación, que es el origen del problema, para evitar círculos viciosos”, le dijo a Letra P.

 

 

 

Fuente: Ecolatina

 

 

“Sí, hay riesgo de atraso. Si los precios se mueven entre el 2 y el 3,5% mensual, como vimos en el último semestre, y se intenta calmar al dólar, ya sea por las elecciones o para que la inflación frene, en algún momento va a quedar rezagado. Pero otra vez: la clave no es trabajar sobre el valor nominal del tipo de cambio, que es lo más sencillo, sino sobre la inflación, que tiene que estar en niveles más razonables”, agregó.

 

El análisis de la evolución de la balanza comercial obliga a mayores precisiones, dado que el superávit, de más de 5.500 millones de dólares en el primer semestre, se logró en base a una caída en picada de las importaciones, del 23,5% en junio, y de un más que modesto incremento de las exportaciones, del 1,9%.

 

-¿El tipo de cambio no resulta suficiente para estimular las ventas externas? –preguntó Letra P.

 

-Esa es una cuestión interesante. Lo que usted menciona demuestra que la suba del dólar no soluciona nada, que genera más costos que beneficios y que estos tienen cada vez menor duración -respondió Buteler.

 

-¿Por qué?

 

-Porque también hay insumos importados que se deben pagar en dólares, porque una devaluación del peso desata una inflación galopante y, sobre todo, porque eso no hace que se abran mercados. Exportar más depende de un trabajo que lleva años y que va a obligar no solo a ganar mercados sino a mantenerlos.

 

Ziccarelli, por su parte, explicó que “la respuesta de la balanza comercial es lógica. La actividad no termina de hacer piso y las importaciones no despegan. Respecto de las exportaciones, no creo que su performance sea explicada por el tipo de cambio. En general hay una economía global que demanda menos y compite más. Es evidente que nuestra inserción en el mundo no es la más recomendable dado el perfil exportador primario que del país”.

 

El presidente Javier Milei expone sus ideas ante el empresariado
Automeme de Javier Milei. 

También te puede interesar