La vicepresidenta de la Nación, Gabriela Michetti, sostuvo que “definitivamente” el equipo que conduce Mauricio Macri tuvo las “expectativas más altas” de lo que correspondía, escenario que imposibilitó la rapidez de los cambios propuestos.
“Es un año difícil, es una elección muy desafiante para nosotros, tal vez la más desafiante de todas las que hemos tenido”, dijo la vicepresidenta en una entrevista concedida al diario La Capital de Mar del Plata. De cara al enfrentamiento en las urnas, consideró que “hay una chance importante para poder renovar la gestión y administración del Estado porque siento que en la Argentina se ha dado un salto en el sentido de que la gente ha hecho mucho esfuerzo”.
Si bien reconoció el escenario de crisis, sostuvo que el país “creció siete bimestres seguidos hasta que se produjo la crisis de mayo y otra vez volvimos a tener inestabilidad cambiaria”.
En ese marco confirmó que como integrante del Gobierno habían analizado que sería más sencillo resolver los problemas. “Pensábamos que íbamos a poder bajar la pobreza mucho más de lo que la estamos bajando. Y también pensamos que íbamos a encontrar la posibilidad de crecer y tener inversiones mucho más rápido. Si en algo cometimos un error fue en tener expectativas más altas de las que se podía”, dijo y agregó que el “el problema (fue que) el país era más grande de lo que pensábamos. Nosotros veníamos muy embalados porque en la Ciudad (de Buenos Aires) ordenamos el Estado y crecimos”.
“Definitivamente nosotros tuvimos expectativas más altas, pensábamos que iban a ser más rápidos los cambios”, dijo.
Michetti, además, se refirió al posible cambio de fórmula presidencial ante la eventual candidatura a vicepresidente de las ministras Carolina Stanley o a Patricia Bullrich. “Si Mauricio me dice que lo siga acompañando, fantástico, pero si él piensa que tiene que ser otra persona no tengo problema. Quiero ayudar, ser parte del equipo y acompañar”, dijo y rechazó la posibilidad de integrar la lista de candidatos a legisladores.