“Va a haber un genocidio total” y los líderes del alzamiento en Bolivia están llevando a cabo “una cacería de brujas” contra dirigentes del Movimiento Al Socialismo (MAS), aseguró la diputada Alicia Canqui en diálogo con Letra P. La legisladora, perteneciente al partido del presidente derrocado, Evo Morales, afirmó que los sectores más expuestos son los sindicales, campesinos e indígenas. “ Estamos en una dictadura civil”, agregó.
Ante la ola de violencia que vive ese país, que ha provocado la quema de las casas de diputados, senadores y gobernadores oficialistas, Canqui les dijo a los líderes de la que hasta el domingo era la oposición que “entren al Palacio” y “vayan a gobernar”, pero “que no le hagan tanto daño al pueblo boliviano”. “Si quieren que nos maten a nosotros pero, no a ellos”, completó en el diálogo telefónico con Letra P entre lágrimas y con la voz quebrada.
BIO. Alicia Canqui tiene 53 años y es licenciada en Ciencias de la Educación. Además, es dirigente campesina y rural. Durante los gobiernos de Evo Morales desempeñó funciones en el Ministerio de Educación y en la Asamblea Legislativa Plurinacional como diputada por el Departamento de Chuquisaca. Durante su juventud vivió las persecuciones políticas que sufrió su padre bajo la dictadura de Luis García Meza (1980-1981).
-¿Qué balance hace del golpe de Estado que se terminó de consumar el domingo?
-Esto ya estaba planificado con anticipación. Todo estaba premeditado por los empresarios privados, por la derecha neoliberal recalcitrante y por los exiliados que se han ido para no rendir cuentas en el país y que tienen deudas en el Estado. Es un plan de (Gonzalo) Sánchez de Lozada, Carlos Mesa y (Luis Fernando) Camacho, que de la noche a la mañana ha aparecido y ha desordenado todo el país. Es un plan maquiavélico con el objetivo de destrozar este proceso que ha recuperado nuestra identidad, nuestras lenguas indígenas, que jamás han estado visibilizadas. Estaban con una intención desesperada de poder. Ellos habían perdido ese poder que ostentaban y que no tenían porque los pueblos indígenas estaban dentro de este proceso de cambio.
-¿Cómo viven esta situación los dirigentes del Movimiento Al Socialismo?
-Estamos viviendo una zozobra y una desesperación. Da mucha pena. Nuestra Policía y nuestro Ejército se han dado la vuelta y están con los neoliberales. Están masacrando en El Alto a esa gente humilde del campo. Me da cólera. Posiblemente entren en el Chapare porque tienen a dos mil mineros preparados. ¿Para qué quieren hacerlo? Son gente humilde que produce hojas de coca y frutas. ¿Qué les va a pasar a esos niños? ¿A esas señoras de la tercera edad?
"Las Fuerzas Armadas no deberían estar aquí metiendo bala. Deberían estar en la frontera y resguardando a los ciudadanos".
-¿Cómo calificaría el accionar de la Policía y las Fuerzas Armadas?
-La Policía, que debería proteger a la gente, está masacrando y matando en El Alto. Va a haber un genocidio total, una masacre blanca. El plan es hacernos desaparecer a los pueblos (originarios). Han quemado la wiphala, que no es únicamente un símbolo de los pueblos indígenas, es un símbolo de toda Latinoamérica. Han formado grupos de choque que se hacen pasar por masistas. Bolivia está de luto. Cada muerto es un dolor para todos nosotros. Ellos no deberían estar aquí metiendo bala. Deberían estar en la frontera y resguardando a los ciudadanos. En El Alto hay una guerra civil y los medios de Bolivia no publican nada. De los enfrentamientos en La Paz publican todo, pero de los pobres nada. Claro, que nos rompan y nos destrocen, pero no a los ricos. Es una pena.
Esta es una traición de las Fuerzas Armadas, de la Policía y de los empresarios privados, que se han beneficiado siempre y le han dado la espalda al presidente Morales. El presidente había enterrado el racismo, pero va a ser difícil recuperar esta división, este fraccionamiento que se ha suscitado. Dicen que han venido a unir al pueblo, pero han venido a destrozar. Me siento decepcionada, pensé que habíamos trabajado mucho, pero veo que no. La gente elitista, la racista, la clasista sigue de pie y ha ganado. En algún momento se darán cuenta de todos los logros que hemos conseguido.
-¿Qué tipo de gobierno puede salir de este proceso?
-A ver si el gobierno que va a entrar hace el trabajo que hizo el presidente Morales. Bolivia ha tenido un giro enorme en lo económico, en lo social, en lo político y en lo cultural. Ha habido una integración de la mujer, bonos sociales para los niños, para la tercera edad y para las embarazadas, juegos plurinacionales, (computadoras) portátiles para todos los maestros, escuelas nuevas, caminos, represas, viviendas. Ojalá ellos hagan eso porque el proceso que ha levantado el presidente Morales tiene que seguir. ¿Cuántos años han estado ellos en el gobierno? Bolivia siempre fue un país subdesarrollado, mendigo. Este pueblo se ha levantado y ha despertado. Es una pena cómo esta gente se maneja por sus intereses mezquinos, personales y sectoriales sin pensar en Bolivia. Que entren al Palacio y vayan a gobernar, pero que no maten a nuestra gente, que no le hagan tanto daño al pueblo boliviano, a la gente más desprotegida. Si quieren que nos maten a nosotros pero no a ellos. Son gente inocente.
-Como diputada deberá jugar un rol importante en la sucesión del Poder Ejecutivo. ¿Quién debería asumir en estos momentos?
-Conforme a la normativa, nosotros tenemos procedimientos jurídicos y técnicos que tenemos que cumplir. Acorde a aquellos vamos a actuar. Corresponde que tome el poder la presidenta del Senado, Adriana Salvatierra, pero ha renunciado, por lo que entonces le tocaría al presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, quien también renunció. Entonces regresaría al primer vicepresidente del Senado y así sucesivamente. Las renuncias se tienen que presentar objetivamente en documentos. En tanto no se hayan presentado, no se podrán quitar las presidencias, por lo tanto eso está en veremos. Una vez que nos convoquen a sesión plenaria, nos interiorizaremos para saber quiénes han presentado sus renuncias acorde a los procedimientos. Ahí se tratará la ley y se remitirá al Tribunal Electoral.
"El presidente Evo Morales había enterrado el racismo, pero va a ser difícil recuperar esta división, este fraccionamiento que se ha suscitado".
-La oposición convocó a una sesión parlamentaria para este martes ¿Están dadas las condiciones para llevarla a cabo?
-En estos momentos nos están obligando a legislar, pero no tenemos garantías. ¿Quién nos garantiza nuestra vida y nuestro bienestar? ¿Quién nos garantiza llegar a salvo hasta la Asamblea? Nadie. Solo nos exigen que vayamos amenazándonos.
-¿Ustedes, como bancada del Movimiento Al Socialismo van a aprobar las renuncias de Evo Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera, Adriana Salvatierra y Víctor Borda?
-Vamos a hacer un análisis para saber si corresponde o no en función a las renuncias. Todavía lo tenemos que analizar. Si cumplen todo el conducto regular, entonces corresponde aprobarlas. Si cumplen los requisitos y si hay el quórum correspondiente, las vamos a aprobar. Si no es así, tendrá que haber una renovación directiva.
-México sostiene que hay 20 personalidades del Poder Ejecutivo y Legislativo en su embajada y los ministros de Gobierno, Carlos Romero, y de Planificación, Mariana Prado, están en la embajada de Argentina ¿Sabe algo sobre la situación de todos ellos?
-Hay persecución a los que estaban cerca del presidente, a los ministros y a los dirigentes sindicales. Es prácticamente una cacería de brujas. Estamos en una dictadura civil. Me recuerda a cuando yo era niña y viví la dictadura de (Luis) García Meza. Falta que el Ejército entre casa por casa y nos apaleen como aquella vez. Cuando yo era niña, mi papá fue un perseguido político. Siento que estamos volviendo a repetir lo mismo. Esa es la tristeza y la decepción que siento con el Ejército y la Policía.