Un día después del golpe de Estado contra Evo Morales en Bolivia, el sector triunfante busca este lunes reunir a la Asamblea Legislativa y conformar un gobierno de transición, algo para lo que deberá lidiar con dos obstáculos: la falta de quórum en el cuerpo si no se hacen presentes los representantes del Movimiento Al Socialismo (MAS) y la ausencia de línea sucesoria, dadas las renuncias del vicepresidente y de los titulares del Senado y la Cámara de Diputados. Ante ese escenario, las últimas gestiones apuntan a la posible asunción de la vicepresidenta segunda de la Cámara Alta, Jeanine Áñez, quien sería la encargada de convocar a una nueva elección presidencial en 90 días.
La propia Áñez, de 52 años, reconoció esa posibilidad entre lágrimas, antes de viajar desde su departamento, Beni, a La Paz para asistir a la sesión legislativa.
"Que quede bien claro que esto es solamente una transición para llamar a elecciones que sean transparentes y para que el pueblo elija a sus mandatarios. Esto me tocó, soy la segunda vicepresidenta. Si tengo las condiciones, lo asumiré, lo haré por el país, pero si los movimientos deciden otro camino también lo voy a respetar", indicó.
El artículo 169 de la Constitución de Bolivia indica que “en caso de impedimento o ausencia definitiva de la Presidenta o del Presidente, será reemplazada o reemplazado en el cargo por la Vicepresidenta o el Vicepresidente y, a falta de este, por la Presidenta o el Presidente del Senado, y a falta de esta o este por la Presidente o el Presidente de la Cámara de Diputados. En este último caso, se convocarán nuevas elecciones en el plazo máximo de 90 días”. Nada dice sobre los pasos a seguir si se produce la ausencia de toda la línea sucesoria.
La dimisión de Morales se dio en paralelo a la del vicepresidente Álvaro García Linera, de la presidenta del Senado Adriana Salvatierra, y del titular de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, quien fue secuestrado el sábado por una turba y vio su domicilio incendiado más tarde.
Sin embargo, el artículo 41 del Reglamento General del Senado, indica que el vice segundo, en este caso Áñez, puede “reemplazar a la Presidenta o Presidente y a la Primera Vicepresidenta o Primer vicepresidente, cuando ambos se hallen ausentes por cualquier impedimento”.
En tanto, la Organización de Estados Americanos (OEA) evitó hablar de golpe militar y rechazó "cualquier salida inconstitucional a la situación" que atraviesa Bolivia. En ese sentido, reclamó que la Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia se reúna para "nombrar nuevas autoridades que garanticen un nuevo proceso electoral".
"Es importante que la Justicia continúe investigando las responsabilidades existentes respecto a la comisión de delitos vinculados al proceso electoral celebrado el 20 de octubre", concluye la misiva que publicó el organismo que conduce el uruguayo Luis Almagro.