De movida, el gobernador electo Axel Kicillof le marcó la cancha a la mandataria bonaerense saliente, María Eugenia Vidal, al pedirle que “retrotraiga” el reciente aumento en la boleta de luz del orden del 25% que la administración vidalista determinó al día siguiente de la derrota electoral, cuya aplicación está prevista a partir del 1 de enero, cuando ya esté en funciones el dirigente del Frente de Todos. Además, le solicitó que no toque ninguna de las paritarias del Estado hasta el 10 de diciembre y acordaron analizar juntos el presupuesto 2020.
Fue una reunión de unas dos horas que mantuvieron a solas en el despacho de la mandataria, y durante la cual recorrieron los temas centrales de la gestión, mientras los ministros de Vidal y los integrantes del equipo de Kicillof aguardaban en el Salón de Acuerdos.
“Le pedí a la gobernadora que retrotraiga el aumento tarifario que está planteado”, dijo Kicillof a la salida del primer encuentro de transición. El ex ministro de Economía puso énfasis en la crisis económica y las ganancias que vienen teniendo las empresas energéticas en la esfera bonaerense, mayormente bajo la órbita del Grupo DESA, de Rogelio Pagano.
Kicillof llega a la gobernación (Foto: AGLP)
“La gobernadora dijo que estaba previsto, que venía desde agosto pendiente. Yo planteé que, como está la gente y lo que ganaron las empresas, no me parecía”, detalló Kicillof y remarcó que suyo no fue el reclamo de “una definición” sino “un pedido”.
También se abordó el tema paritario, sobre el cual, según supo Letra P, el futuro gobernador pidió que “no se tomen decisiones este mes que afecten o comprometan la gestión siguiente”.
Kicillof detalló que durante el encuentro se recorrieron “todos los temas de la provincia” y que se planteó “conocer el estado de situación de las diferentes áreas”. “Todo lo que es información para hacer un diagnóstico bien preciso, una radiografía de la situación provincial con información del propio gobierno”, remarcó el futuro mandatario sobre las necesidades planteadas a la mandataria.
Uno de los temas que más preocupa al economista es la situación financiera de la provincia. Conocer los números para trazar un diagnóstico acertado es clave para las medidas que decida adoptar. “Va a haber una reunión entre el equipo económico nuestro y el ministerio de Economía y el Banco Provincia”, contó Kicillof, aunque aclaró: “Es un poco el cuadro que teníamos”.
El futuro gobernador destacó la “buena predisposición” mostrada por la mandataria para la transición que, en adelante, continuarán los equipos técnicos que cada uno de ellos designó. Comenzarán la semana que viene, “lo antes posible”, dijo Kicillof. El encargado de coordinar la tarea conjunta será el jefe de Gabinete, Federico Salvai.
Vidal y Kicillof, en el despacho de la mandataria (Foto: Gobernación)
Tras el encuentro, Vidal no realizó declaraciones. Su equipo de prensa difundió una breve gacetilla con fotos de ambos y la confirmación de que el próximo lunes “comenzarán a trabajar los equipos técnicos designados por cada uno para tal fin”.
Kicillof arribó a la gobernación bonaerense a media mañana e ingresó por la entrada principal, sobre calle seis, acompañado de Carlos Bianco, Augusto Costa, Federico Thea y Agustina Vila, el cuarteto elegido para la transición. Como adelantó Letra P, algunos de ellos ocuparán sillas en el fututo gabinete.
El ex ministro de Hacienda y sus colaboradores fueron recibidos además por la jefa del bloque de senadores bonaerenses de Unidad Ciudadana, Teresa García, y el presidente 1º de la Cámara de Diputados provincia, Carlos “Cuto” Moreno, dos dirigentes de confianza y espadas legislativas del futuro gobernador.
Kicillof sale a la gobernación (Foto: AGLP)
RECIBIMIENTO. En el hall de ingreso, luego de pasar por la mesa de entradas, Kicillof fue recibido por una espontánea manifestación de empleados de la gobernación con cantos, gritos y pedidos de selfie. El rito se repitió también a la salida de la cumbre.
El dirigente que en las generales del domingo sacó más de cinco millones de votos -más de un millón trescientos mil de diferencia a Vidal- no llegó en su tradicional Clio que utilizó durante la campaña, pero el vehículo igual tuvo un lugar en el playón del edificio de gobierno, ya que fue Bianco quien lo fue a buscar y lo dejó estacionado allí hasta la retirada de toda la troupe kicillofista.