Una gruesa columna de educadores provenientes de diversos puntos del país y enrolados en Ctera se manifestaba este jueves desde las 8 en inmediaciones de Plaza de Mayo (Bolivar y Avenida de Mayo) para exigirle al gobierno de Mauricio Macri que efectúe la convocatoria a la paritaria nacional docente. Realizando una “sentada” en el lugar, además de la reapertura de ese espacio de negociación, los maestros portaron múltiples carteles en los que denunciaban el vaciamiento de programas educativos (como “Coros y Orquestas”) y el cierre de cursos y secciones. Esta protesta se realiza al día siguiente del paro realizado por el Frente de Unidad Docente Bonaerense en rechazo a las ofertas salariales que puso sobre la mesa la gestión de María Eugenia Vidal.
Frente al Cabildo, los docentes también ponían de manifiesto la defensa de los institutos de formación y el reclamo por una nueva ley de financiamiento educativo.
“Problemas de infraestructura, interrupción en distribución de libros y computadoras, falta de creación de escuelas, desfinanciamiento de escuelas técnicas, no continuidad de formación docente gratuita, entre otras tantas problemáticas”, enumeró durante la manifestación la titular del Ctera, Sonia Alesso, quien, a su vez, apuntó contra “los techos salariales impuestos por el Gobierno nacional que han agravado los conflictos provinciales. A eso se le agregan sumas por fuera del salario como el ítem aula y el presentismo”.
"Llevaremos una nota planteando que necesitamos que nos reciban. Hay situaciones muy complejas. Siguen conflictos abiertos en gran parte del país y el Gobierno no interviene en las provincias con financiamiento para resolver las cuestiones ni convoca a la paritaria nacional", sostuvo el titular del Suteba, Roberto Baradel, en declaraciones a Radio 10.
"Aumentan las tarifas y bajan los salarios, ese es el planteo del gobierno", remarcó el dirigente sindical para marcar: "La solución del gobierno de tirarle la responsabilidad a los gobernadores para desfinanciar al Estado es una barbaridad. María Eugenia Vidal el sábado dijo que no tenía plata, y luego firma un decreto que resigna $ 3 mil millones en la Provincia en lugar de pararle la mano a quienes aumentan las tarifas. Prefieren resignar el financiamiento del Estado para avalar las ganancias de los grandes empresarios amigos del poder".