Un grupo de gremios docentes de la Ciudad de Buenos Aires anunciaron que entregarían materiales didácticos a sus bases y fomentarían actividades en las escuelas para concientizar e informar a los alumnos sobre la desaparición de Santiago Maldonado a alumnos de colegios públicos. La decisión cayó como una bomba en el Gobierno porteño y en el Nacional, cuyos ministros de Educación salieron en bloque a fustigar contra la medida.
Las actividades especiales en las aulas son organizadas en conjunto por las entidades gremiales Ctera, UTE y Suteba, como parte de una "Campaña por la Aparición con Vida" de Maldonado, que se pretende llevar adelante en establecimientos educativos de nivel inicial, primario y secundario. A su vez, el gremio Ademys, vinculado a la izquierda porteña, también se plegó a la propuesta y salió a defenderla.
El ministro de Educación de la Nación, Alejandro Finocchiaro, afirmó que “es grave cuando se introduce la lucha político partidaria en la escuela”. Su par porteña, Soledad Acuña, consideró que “no son materiales educativos distribuidos por el Gobierno”. “Es un llamamiento de CTERA a sus afiliados a través de UTE. El sindicato (CTERA) está en pleno proceso eleccionario y esto tiene que ver con otro conjunto de medidas extremas que están tomando para llevar agua para su molino”, cruzó la ministra, en el ojo de la tormenta de la disputa entre docentes y el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, tras la presentación de una nueva reforma educativa que afectaría a las escuelas secundarias de la Capital.
“Los docentes tenemos la obligación de trabajar la realidad en las aulas y la defensa de los Derechos Humanos. Es una campaña orquestada para desviar la atención de la búsqueda de Santiago”, defendió el secretario General de Ademys, Jorge Adaro.
“Desde nuestro sindicato hemos puesto a disposición para el trabajo en las aulas un material con distintas fuentes y consignas que lejos del “proselitismo” del cual se pretende acusar a los docentes se trata de practicar la defensa irrestricta de los derechos humanos y la condena al autoritarismo y la represión. Se trata de fomentar el pensamiento crítico y cuestionar, como plantea nuestro Diseño Curricular, las lecturas ingenuas sobre los medios de comunicación y sus mensajes”, evaluó Ademys por medio de un comunicado.