El ministro de Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro, firmó un acuerdo entre la Dirección General de Cultura y Educación y la Legislatura provincial. Fue, acaso, uno de sus últimos actos oficiales como funcionario de Vidal ya que el viernes asumirá en el mismo cargo pero a nivel nacional remplazando a Esteban Bullrich, que dejará su puesto para meterse de lleno en la precandidatura a senador nacional por Cambiemos. En el acto destacó como hito en la conducción del área la ley que pena a quienes agreden a los docentes.
“No sé cómo nombrarte, si como director de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires o como ministro de Educación de la Nación”, le dijo, a modo de chiste, el presidente de la Cámara de Diputados, Manuel Mosca. Fue durante la firma de un acta de cooperación pedagógica entre las cámaras legislativas y la cartera educativa. El programa permitirá que empleados del Senado y de Diputados y sus familias terminen el colegio secundario.
Antes de ello, el vicegobernador Daniel Salvador y el propio Mosca llenaron de elogios al ministro que tardó cuatro meses en cerrar la paritaria 2017 con los gremios docente; un conflicto que finalizó la semana pasada con una firma "en disconformidad" de los sindicatos. Finocchiaro no hizo referencia al tema. Por el contrario, optó por destacar como un logro de su gestión la ley que incluye en el Código Procesal Penal la pena a quienes agreden a docentes en situación laboral.
“Tenemos que estar orgullosos, porque hace poco tiempo se aplicó por primera vez y se aplicó en una ocasión en la que, en principio, no se había cometido delito”, exclamó Finocchiaro.
Además, agradeció a los diputados y a los senadores. “Eso lo han logrado ustedes porque ustedes lo han votado”, dijo y agregó que “siempre será un honor pisar este establecimiento”, en referencia a la Cámara de Diputados.
Habló de su familia y, al borde de la emoción, recordó que su padre, oriundo de Chivilcoy, “apenas terminó la secundaria”, pero “se esforzó muchísimo para que sus tres hijos estudiaran porque ahí estaba el futuro y no se equivocó”. Una vez finalizado el acto se retiró sin hacer declaraciones a la prensa.