En los primeros días del mes de abril, la Autoridad Cuenca Matanza Riachuelo clausuró preventivamente un frigorífico que el matarife ex sciolista Alberto Samid posee en la ciudad de Cañuelas, tras haber determinado "vertido de efluentes" y "contaminación", en el marco de un "grave riesgo de daño al ambiente". A raíz de eso, el Rey de la Carne se hizo presente más de una vez en la Dirección de Fiscalización y Adecuación Ambiental, hasta que finalmente obtuvo la habilitación, aunque de forma provisional. Si en seis meses no cumple con una serie de requerimientos solicitados por el organismo, se procederá nuevamente al cierre.
La rapidez con la que el empresario de la carne había conseguido la autorización para que su establecimiento vuelva a funcionar, había despertado comentarios en los pasillos de la entidad que preside la ex diputada nacional del PRO, Gladys González: "Samid se instaló y salió rápido la habilitación, en tiempo récord", deslizaron al aducir que generalmente se trata de un trámite que dura casi un mes, y en esta ocasión demoró poco más de una semana. Y añadieron fuentes cercanas a la Dirección encabezada por Salvador Barbieri, quien tomó la decisión:"Tiene que cumplimentar requisitos de ordenamiento interior y eso lleva muchos días, hay problemas de volcado, suciedad y demás. Había mil chanchos con condiciones bastante deplorables".
Más allá de esto, el expediente de la Acumar sobre el caso, al cual tuvo acceso Letra P, señala que la autorización de funcionamiento es provisional y "a los fines de poner en régimen el sistema de tratamiento de efluentes que permita garantizar la adecuación ambiental del establecimiento, sujeto al cumplimiento del cronograma de tareas" indicado por la Acumar y por el plazo de seis meses. Dicho cronograma, va fijando plazos para el cumplimiento de una serie de requisitos (ocho en total) que tendrá que ir cumpliendo el Rey de la Carne en tiempo y forma, y que van desde el "Permiso de Emisiones Gaseosas" hasta "el resultado de las tomas de muestras de todos los freatímetros así como del punto de vuelco".
Ante el incumplimiento o demora injustificada de dichas tareas, la Acumar advierte que "quedará sin efecto la autorización provisional de funcionamiento en forma automática".
En el expediente en cuestión, se detalla que el 6 de abril pasado se le explicó a Samid los motivos de la clausura y los requerimientos mínimos que "deberá cumplir para obtener una autorización provisional de funcionamiento". En tanto, se describe que, al día siguiente, el empresario de la carne "presentó la documentación solicitada, la cual fue analizada y cumple técnicamente con lo requerido por esta autoridad", por lo que, se ratificó la clausura, pero se otorgó un "permiso provisional de funcionamiento" por seis meses, para que en ese tiempo pueda poner en orden las cosas.
De esta forma, Samid consiguió que le vuelvan a abrir las puertas de “El Fuego y el Agua SA” (Ex Liwin), un establecimiento que viene siendo estudiado por la Acumar desde el año 2010. Cabe recordar que ya en abril de 2016 fue suspendido porque distintos organismos de la provincia de Buenos Aires encontraron una serie de irregularidades en materia de infraestructura, sanitaria e impositiva que derivaron en una cancelación temporal de la faena e intimación al empresario de la carne, reconocido mediáticamente por trompearse con el periodista Mauro Viale en un estudio de televisión, varios años atrás.
"Avanzamos siendo más estrictos en la norma, intensificando las inspecciones y mejorando nuestros sistemas de control sobres estos establecimientos que operaban de forma irregular, afectando de forma grave e inminente los recursos naturales, el agua, el suelo y el ambiente donde viven los vecinos de la Cuenca”, expresó días atrás Gladys González, haciendo hincapié en las nuevas políticas del organismo.
La dirigente, que suena como posible candidata de Cambiemos para las elecciones legislativas, cambió en el medio de todo este conflicto al director general de donde dependía la Dirección de Fiscalización y Adecuación Ambiental, Daniel Guevara, quien había arribado desde Chile de la mano del anterior presidente, Julio Torti. Aunque igualmente esta modificación no estaría relacionada a la novela Samid.