Durante dos horas y media, el ex cacique sindical de los trabajadores constructores de La Plata, Berisso y Ensenada, Juan Pablo "Pata" Medina, desplegó sus argumentos de defensa por la causa en la que está procesado por los delitos de “coacción agravada y compulsión a la huelga en concurso ideal”. Se consideró un preso político, apuntó al presidente Mauricio Macri por su detención y recordó que hace más de una década estuvo preso por hechos similares y terminó sobreseído en la justicia federal.
Medina declaró que se lo acusa “por un hecho netamente gremial, porque, cuando un empresario no cumple lo acordado, los trabajadores se manifiestan", revelaron a Letra P fuentes judiciales.
El gremialista dio su versión en el marco de la investigación por la paralización de obras en construcción registradas en La Plata. Los trabajos eran ejecutados por la empresa Abes Construcciones.
Medina, al ingresar este jueves a los tribunales de La Plata.
Para Medina, el conflicto se originó por falta de respuesta del Ministerio de Trabajo ante los planteos gremiales y por una posición "inflexible" y "provocativa" por parte de la empresa que contrató mano de obra de la bolsa de trabajo de la UOCRA. "Les pagó salarios por debajo del convenio y luego los echó", resaltó en su declaración prestada en sede judicial.
"Yo me enteré por un sindicalista de que Macri dio la orden para que me detuvieran y eso orden la ejecutó el ministro (de Trabajo bonaerense, Marcelo) Villegas", narró el detenido, según confiaron allegados al sindicalista consultados por este medio.
Cuando se le leyó la imputación, según fuentes judiciales consultadas, Medina respondió que en la causa “no hay elementos de prueba” para comprobar que él haya dado las ordenes de frenar las obras en construcción en La Plata y remarcó que, “como en todas las obras, cuando el empresario no cumple con los pagos acordados, los obreros se manifestan”.
"No di órdenes para amenazar a trabajadores; la empresa no cumplió con el contrato de paz social firmado en el gremio", insistió Medina y relató que el capataz, Hugo Denos Armoa, traía obreros de Paraguay y estaban "en negro", es decir, no eran trabajadores registrados legalmente.
Sobre el funcionamiento de la "Bolsa de Trabajo", Medina detalló que esa figura está contemplada en el artículo 9 del Convenio Colectivo de la Construcción 76/75 que establece: "(...) las empleadoras que ejecuten obras en el ámbito de actuación de las seccionales de la U.O.C.R.A., deberán contratar personal por intermedio de la Bolsa de Trabajo que corresponda, atendiendo al lugar de ejecución de la obra."
Para Medina, su detención se realizó en el contexto de una avanzada contra las conquistas laborales de los trabajadores y para precarizar a los obreros.
Las fuentes consultadas indicaron que Medina sostuvo que “no se puede tomar como coacción agravada un reclamo netamente gremial, una acción en reclamo de un pago salarial”.
Según este expediente, que está a cargo del juez de Garantías de La Plata Juan Pablo Massi, el entonces titular de la UOCRA La Plata paralizó las obras en construcción de cinco edificios de la firma Abes que se estaban levantando en el centro de la capital provincial, con el argumento de que esa empresa pagaba “bajos salarios y brindaba malas condiciones laborales” a los obreros.
ANTECEDENTES
En el año 2001, Juan Pablo Medina estuvo detenido varias semanas en la cárcel de la localidad de Magdalena, acusado de paralizar obras en el hipermercado mayorista Nini de la ciudad de La Plata.
Tres recuperar la libertad, al tiempo fue sobreseído por el entonces juez federal Arnaldo Corazza.
Medina estaba acusado de coacción agravada en el marco del artículo 149 inciso 3 del Código Penal. Esa norma fue sancionada para proteger a la ciudadanía de gobiernos dictatoriales y, con esa interpretación, el magistrado dictó el cese de la persecución penal para el sindicalista.
En esa oportunidad, representantes de Abes denunciaron ante la fiscal Ana Medina que el sindicato “enviaba grupos de personas para impedir el ingreso y egreso de trabajadores bajo amenazas e intimidaciones, por lo que las obras estaban paralizadas”.
A principios de septiembre, el juez Massi ordenó intimar al gremio a cesar con los bloqueos en las obras y dispuso presencia policial en ellas para garantizar la actividad y el trabajo en los obradores.
En ese sentido, según fuentes judiciales, en su declaración indagatoria, Medina negó conocer a los empresarios vinculados a Abes, “pero sí acompañó documentación sobre el tema”, que será materia de evaluación por parte de la fiscal Medina.
“Él ni siquiera conoce el nombre del señor de la empresa Abes (Carlos Tejada Gómez), pero sí detalló que Abes firmó un acuerdo con la UOCRA La Plata que no respetó, incorporó gente y no le pagó y ahí se generó el conflicto”, comentaron allegados al sindicalista detenido.
Tras su declaración, Medina fue llevado en una camioneta del Servicio Penitenciario Bonaerense hacia la prisión de la localidad de Marcos Paz, donde se encuentra tras las rejas por orden de la justicia federal de Quilmes desde el pasado 26 de septiembre, y suma cuatro causas penales en su contra.
Además de este expediente, sobre el gremialista pesan otras dos prisiones preventivas dictadas por la justicia penal bonaerense por los delitos de “asociación ilícita” y por “intimidación pública”, por haber amenazado con “prender fuego” la provincia en caso de ser detenido.
