En el mes de abril, el gobierno de la provincia de Buenos Aires, a través de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), había detenido a 11 barras de Racing armados en la previa de un partido en Avellaneda. Ahora, el titular del organismo, Juan Manuel Lugones, denunció que los violentos estuvieron presentes en el acto de cierre de campaña de Cristina Fernández de Kirchner, trabajando en la seguridad. La administración que encabeza María Eugenia Vidal pedirá formalmente en la Justicia que se investigue.
"La Aprevide va a hacer una presentación judicial para pedir que se investigue esta cuestión", le dijo a Letra P una fuente de la gestión bonaerense de Cambiemos.
Luego de que miembros de los tres grupos que integran la barra del equipo de Avellaneda -la Guardia Imperial, los Racing Stones y La 95- estuviesen en el estadio Presidente Juan Domingo Perón este último lunes por la tarde, presuntamente trabajando como encargados de seguridad en la organización, el organismo que depende del Ministerio de Seguridad bonaerense reprochó la presencia de quienes habían quedado detenidos por la Policía, seis meses atrás, en la puerta del Cilindro y con armas en su poder.
En el gobierno de Vidal manejan en principio dos hipótesis: que los barras fueron llevados por el intendente local, Jorge Ferraresi, o bien por el presidente de la Academia, Víctor Blanco, para que "cuidasen el estadio". "A juzgar por las pintadas y por cómo quedó la cancha, si fue así, hicieron bastante mal su trabajo", analizó una fuente consultada.
El jefe comunal peronista se defendió en diálogo con radio Del Plata, horas después de las denuncias de Lugones. "Primero, un movimiento nacional y popular no necesita seguridad", dijo y continuó: "Un funcionario como él debería hacer las denuncias a través de los mecanismos institucionales y no livianamente en redes sociales".
"Nosotros luchamos para terminar con estas mafias, para que no vayan más a las canchas, pero reaparecen de la mano de la mala política", dijo Lugones en TN. "La barra brava se maneja por plata; es un grupo delictivo, un grupo mafioso. Y si hoy llevó la bandera de La Cámpora o se puso la camiseta o se subió al paravalanchas donde para la Guardia Imperial, no lo hizo por amor al cristinismo, lo hizo por plata", disparó y agregó: "También estaban los que se referencian en Nuevo Encuentro, la barra de Morón, que estaba dando vueltas por ahí".
Salvo el "Huevo" Escobar, estaban todos los barras de Racing en el acto de Unidad Ciudadana, aseguran voceros de Seguridad.
En abril, la Aprevide detuvo a 11 integrantes de la facción oficial “La 95” en la previa del partido en que Racing recibiría a Atlético Tucumán. En aquella ocasión, personal de la Agencia detectó irregularidades en un vehículo que estaba en el estacionamiento del club y procedió a la intervención: secuestró sevillanas, manoplas, un revólver, municiones, cuchillos y objetos punzantes, como también documentos que no se correspondían con los detenidos y entradas pertenecientes a otro partido. Además de aquellos violentos, también había quedado bajo arresto un empleado de Utedyc, encargado de uno de los controles de acceso.
Entre los detenidos había estado el "Gordo Zucker", presente este lunes en Racing.
Lo cierto es que el gobierno bonaerense va a hacer una denuncia formal para que la Justicia investigue, ya que pretende que se sepa si hubo convocatoria a los violentos para que trabajen como encargados de seguridad y, si fue así, quién los convocó.
En agosto, el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, y Lugones se habían reunido con Blanco, junto al secretario general del club, Cristian Devia, para hacer un repaso de la gestión de la Aprevide con respecto a las actividades de la barra brava de Racing, que en ese entonces tenía a más de cien de sus integrantes con prohibición de concurrencia.