Fuentes del gobierno provincial y de la Legislatura bonaerense le confirmaron a Letra P que este lunes 7 de marzo ingresará por la Cámara de Diputados el proyecto ideado por la gobernadora María Eugenia Vidal de emergencia administrativa. Es una prioridad de la gestión de Cambiemos, para reducir considerablemente el tiempo que demora llevar a cabo una licitación en territorio provincial.
Como ya contó este portal, son el ministro de Coordinación y Gestión, Roberto Gigante, y el secretario Legal y Técnico, Julio Conte Grand, quienes vienen trabajando intensamente en los últimos días para elaborar un primer proyecto de reforma administrativa y tecnológica.
El objetivo principal -si bien son varios puntos los que aborda el plan- es el de modificar en un futuro cercano los procesos de compras y licitaciones, que en la provincia de Buenos Aires demoran hasta dos veces más que en Capital Federal. La gestión PRO, que está acostumbrada al día a día y funcionamiento de la administración porteña, está espantada, entre otras cosas, por cómo es la realidad bonaerense, en ese sentido.
Lo que pasa en territorio bonaerense es que hasta marzo del año que viene Vidal no puede comenzar con alguna obra importante, teniendo en cuenta los plazos que llevan las licitaciones hoy en día. Y en Ciudad es distinto. Según le remarcaron a este portal, en Capital Federal una licitación demora promedio entre cuatro y seis meses, depende cuál sea. En provincia, el doble.
En su discurso de apertura de sesiones ordinarias en la Legislatura este último martes, Vidal ahondó en un punto que considera clave para gestionar: "Encontramos un Estado que está más preparado para obstaculizar que para gobernar, con un sistema de administración obsoleto, burocrático y lento", dijo la gobernadora, detallando que "ningún proceso de la administración pública es 100% digital: por mes se transportan 175 mil expedientes en papel y detrás de esos expedientes y el tiempo que se pierde en cada traslado, hay una persona esperando".
"Recibimos un Estado que no puede dar respuesta a los problemas porque una licitación para hacer una obra tarda entre 9 y 11 meses para adjudicarse, y ni hablemos del tiempo para que la obra efectivamente empiece. Seamos claros en esto: aún si tuviéramos el dinero, el proyecto aprobado y la capacidad de hacer, con esta forma de administrar, no podríamos usar los recursos de un año porque los expedientes viajan en carretillas con papel por decenas de oficinas hasta ser aprobados", criticó con dureza.
Por eso, para ella es fundamental realizar esta reforma, que le permitirá agilizar todos los trámites claves. "Es una prioridad, una de las primeras cosas que tenemos que resolver", le repiteron a este portal fuentes de Casa de Gobierno.
La sesión en la Cámara baja está programada para el miércoles 9, y el tratamiento de este proyecto dependerá de la conformación de las comisiones. También se espera que sea tratada la emergencia en infraestructura.