Los representantes de la Iglesia católica de Lomas de Zamora, junto a dirigentes de varias fuerzas políticas como el Frente Renovador y el GEN, encendieron la alarma en relación al posible traslado del bingo de Temperley, hacia la Sala construida cerca del Puente La Noria.
Sucede que, pese a estar demorada la resolución de Lotería, que habilitaría este cambio, la gobernadora, María Eugenia Vidal, todavía no dio a conocer qué decisión tomará.
“Nos vamos a tomar todo el tiempo que haga falta para evaluar si ese lugar debe ser o no habilitado” había dicho la mandataria semanas atrás, ante varias consultas de la prensa. Y todavía, no hubo mayores precisiones al respecto.
La nueva sala de juego está preparada para su apertura desde fines del año pasado, cuando el entonces gobernador, Daniel Scioli, acordó con Codere el traslado del Bingo de Temperley.
Pero la decisión se demoró durante la campaña, y se abandonó tras la derrota del ex candidato a la presidencia.
Ahora, la indefinición de la mandataria, vuelve a poner en marcha la campaña que desde fines del año pasado iniciaron desde la iglesia y sectores políticos.
“Todos sabemos de las consecuencias terribles que se siguen de una adicción como la del juego. Permitirla y favorecerla es criminal, un crimen contra los más pobres, ya que si hay un lugar donde circulan miles, es en esa zona de nuestra periferia”, había alertado a través de un comunicado oficial el obispo de Lomas de Zamora, monseñor Jorge Lugones.
En sintonía, se pronunciaron, los dirigentes del Frente Renovador y del GEN, quienes curiosamente están muy cerca de la gestión del presidente, Mauricio Macri, y de Vidal.
“La construcción que se realizó en el Puente La Noria es muy superior a la sala que hay en Temperley, donde las tragamonedas no superaban las 100 máquinas. En La Noria puede entrar casi 600” afirmó a Letra P, el ex legisladora del massismo, Walter Martello.
“Pero aún si no se ampliaran las tragamonedas, sería un despropósito porque el lugar esta a pasos de la termina de micros, un lugar de ingreso y egreso de trabajadores de Buenos Aires hacia la provincia, y está a un kilómetro y medio de la feria la salada” remarcó Martello, quien tiempo atrás publicó un libro sobre la historia del juego en Buenos Aires.
"Es una zona pobre, sin cloacas, con problemas eléctricos, de agua, asfalto, pero le quieren meter un bingo con 600 máquinas, cuando el de Temperley tiene 150” había denunciado también el jefe del bloque de diputados del GEN, Marcelo Díaz.
Desde el inicio de su gestión, la gobernadora dio marcha atrás con dos decisiones polémicas respecto al juego.
Una, la mencionada situación del bingo en Lomas de Zamora, y otra la determinación de anular una resolución de Lotería, firmada al comienzo de su gestión, por el actual titular, Melitón López, y por la cual se habilitaba el sistema de “quiniela instantánea”.
Ahora queda pendiente saber cuál será el rumbo que adoptará la mandataria respecto al juego en la provincia, teniendo en cuenta que es una de los negocios que genera una fuerte ganancia, segura y en poco tiempo.