A casi cinco meses de la derrota electoral en la capital de la provincia de Buenos Aires, el peronismo busca la manera de reconfigurarse como oposición. Hay tres sectores visibles y en ninguno está contemplado el protagonismo del ex intendente Pablo Bruera. A la espera por la revalidación de autoridades, muchos consideran que lo que queda de la estructura bruerista debería dar un paso al costado en la conducción del partido.
Por un lado, el reagrupamiento de distintos dirigentes del peronismo platense le está dando vida a un grupo llamado “Militancia para la Victoria”. Orgánicamente aparece allí, el vicepresidente del PJ, Omar Alegre como uno de los puntales. También se suman el ex diputado nacional, Mario Oporto, el actual legislador provincial y responsable del Movimiento Evita en La Plata, Gustavo Di Marzio, un histórico del PJ Ateneo Eva Perón, Roberto “Pocho” Prandini , Emilio “Taka” Muntaner, senador de mandato cumplido que pasó de bruerista a mariottista y respaldó a Florencia Saintout en la interna platense. En la mesa -que integra Victoria Tolosa Paz, responsable de “Casa para la Victoria”- también aparecen Alejandro Rusconi (Movimiento Evita), Lalo Marchesi y la ex diputada nacional Elda Agüero, entre otros.
El kirchnerismo, replegado en La Cámpora, y que se le animó a Bruera en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de agosto, también ve la necesidad de que el otrora intendente dé un paso al costado del PJ. Con presencia propia en el concejo deliberante local deposita en la figura de los concejales Guillermo “Nano” Cara y Florencia Saintout -decana de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP y precandidata a intendenta en agosto pasado- la motorización para correr a Bruera del peronsimo. Sin embargo, quien parece haber roto la alianza estratégica que tenía con el ex intendente es Martín Alaniz, responsable de la JP La Cámpora en La Plata, ex concejal y funcionario de la Agencia Federal de Investigación (AFI).
Otro de los que actores que también busca lugar en PJ en desmedro de los Bruera es Gonzalo Atanasof. El ex diputado provincial por el denarvísmo y también ex presidente de la empresa que concesiona la autopista Buenos Aires-La Plata, AUBASA, fue funcional a Bruera en la medida en que trabajó para la campaña presidencial de Daniel Scioli. Sin embargo Bruera piensa en Atanasof como su Plan B, destino que también podría tener la diputada por la Octava sección, Valeria Amendolara. En las redes sociales, Atanasof empieza mostrarse como alternativa para el PJ local.
Quien fuera presidente del concejo deliberante hasta el último día de gobierno del ex intendente, Pedro Borgini también estaría por darle la espalda a Pablo Bruera. Es que el origen de Borgini es sindical y desde ese lugar fue el acompañamiento. Con Bruera fuera del escenario, el posicionamiento cambia.
Todos los sectores coinciden en que Bruera hizo perder al peronismo en La Plata. Insisten en que las falencias del actual intendente de Cambiemos, Julio Garro, residen –en parte- en cómo dejó la ciudad la saliente gestión.
Actualmente el bruerismo se reduce a dos concejales: Gabriel Bruera y Gabriel Céspedes. También sigue acompañando Amendolara y el ex jefe de gabinete y de pasado en la agrupación Quebracho, Santiago Martorelli.
Pero Bruera resistirá. Recién en el 2017 se renovarán las autoridades. La alternativa y lo que piden para evitar la interna partidaria es que el ex jefe comunal dé un paso al costad y renuncie a la presidencia del partido. Su tío y consejero provincial del PJ por la Octava sección, Luis “Lucho” Lugones, ya les avisó -desde la soledad del edificio partidario ubicado a metros de la gobernación provincial- al resto de los sectores que “si quieren ir por el PJ que se presenten a internas y vemos qué hacen”.
