El presidente Mauricio Macri anunció este mediodía en Casa Rosada el lanzamiento de una serie de acciones apuntadas a la modernización del Estado en el marco de un “país digital”. Focalizando en la “transparencia” y el “acceso a la información”, profundizó su discurso tendiente a diferenciarse desde lo ético con la pasada gestión kirchnerista. “El Estado no puede actuar como si fuese un aguantadero de la política”, deslizó para afirmar que la administración pública tiene que dejar de ser “un lugar desordenado, desarticulado, oscuro, sin información”.
En una escueta aparición ante los medios para luego retirarse y dejar el lugar al jefe de Gabinete Marcos Peña y al ministro de Modernización, Andrés Ibarra, Macri afirmó que “estamos comprometidos con que el Estado esté presente. Por más que nos hayan querido convencer de lo contrario el Estado somos todos”, deslizó para cuestionar al gobierno anterior: “El Estado o puede actuar como si fuese un aguantadero de la política”,
El jefe de Estado bregó por “un Estado del siglo XXI” basado “en la transparencia”, meses después del caso en el que se dilucidó que el periodista alineado al macrismo, Fernando Niembro, realizó contratos millonarios con el Gobierno de la Ciudad.
De esta forma, el mandatario nacional instó por lograr un Estado “que rinde cuentas”, anunciando un “plataforma única de compras” para “que no nos vayamos enterando mal y tarde a través de un Boletín Oficial”. Aquí, pidió que intendentes y gobernadores “sean parte de esta agenda digital”, ya que “queremos un país digital”, al recordar que en términos de “transparencia y acceso a la información estamos 54 y Uruguay esta séptimo”. Ante eso, se propuso “estar entre los diez” en los próximos años. “Ser responsables al momento de administrar y rendir cuentas. Siempre diciendo la verdad”, puntualizó.
Asimismo, Macri apeló a la “recuperación de recursos humanos, tecnología, sistemas y un Gobierno abierto”, volviendo “a recrear la carrera pública, los concursos, que cada empleado se sienta orgulloso del trabajo que hace y se sienta reconocido por el conjunto de la sociedad”.
En lo que refiere a las políticas de modernización, el Presidente focalizó en terminar con la burocracia de los trámites: “Terminar con el maltrato, los teléfonos que no contestan, con las largas colas”, adelantando que se ampliará el sistema de consulta, y la posibilidad de resolver trámites desde el celular, la computadora.
En la misma sintonía del jefe de Estado, el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, cuestionó a la pasada gestión al denunciar el “reservorio de la mala política, que es financiar cierto tipo de militancia desde el dinero público” y llamó a “devolverle al Estado su lugar”.
En la estrategia de llegar a un “país digital”, Ibarra adelantó que se buscará ir “hacia una administración ágil, con trámites más simples” con “expediente electrónico” para “despapelizar a la gestión y agilizar los trámites internos”.