La reforma electoral entró en etapa de definiciones y, en medio de una dura discusión en el Senado, el Gobierno se jugó su última carta. En busca de una foto de impacto político, el presidente Mauricio Macri y el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, recibieron este martes a gobernadores peronistas que dieron su respaldo a la implementación de la boleta electrónica en reemplazo de la tradicional de papel.
Del encuentro, que se produjo en la quinta de Olivos horas antes de que un plenario de comisiones del Senado reanudara la discusión del proyecto, participaron los gobernadores Mario Das Neves (Chubut), Juan Manuel Urtubey (Salta), Omar Gutiérrez (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro), Rosana Bertone (Tierra del Fuego), Domingo Peppo (Chaco) y Juan Schiaretti (Córdoba).
El Gobierno mantiene su intención de aplicar la boleta electrónica en todo el país a partir de las elecciones legislativas de 2017. No obstante, Frigerio reveló, tras la reunión, que negocia con los senadores para incorporar gradualismo en aquellos distritos donde el nuevo sistema no llegue a implementarse.
“La expectativa del Presidente y del Gobierno es que se vote en todo el país de una manera distinta en 2017, que los ciudadanos tengan más confianza en el proceso electoral. Sin embargo, estamos conversando con los senadores para dejar una puerta abierta y, en caso de que en algún lugar no se llegue, aplicar cierto gradualismo en la implementación de la ley”, informó el funcionario en conferencia de prensa. Y agregó: “La idea del presidente es que todos los argentinos puedan tener los beneficios de la aplicación de la tecnología en el voto”.
Consultado sobre el chip de la boleta, el otro de los focos de discusión en el Senado, Frigerio aclaró que “en la ley no estamos especificando determinada tecnología, porque la tecnología evoluciona permanentemente”.
“La tecnología específica para cada elección va a tener que ser homologada y aprobada por la Cámara Electoral”, explicó el ministro.
A su vez, remarcó que “éste es el primer paso de una reforma política mucho más amplia y ambiciosa, que incorpora el financiamiento de la política y se empezará a discutir los primeros meses del año que viene”.
Por su parte, Bertone sostuvo que es necesario “hacer reformas que persistan en el tiempo”. “Creo en la aplicación de nuevas tecnologías y este sistema ayuda mucho en la transparencia, en la agilidad, en gastar menos, en simplificar los procesos”, ponderó la gobernadora fueguina, una de las integrantes de la comitiva que acompañó a Macri a su primer encuentro con el papa Bergoglio, en febrero pasado.
A su turno, Urtubey -el salteño también estuvo en aquel avión- indicó que “este proceso libera al ciudadano y al representante de un enorme ejercito de intermediarios (como los punteros) que establecen beneficios para unos por sobre otros”. Al relatar la experiencia de la boleta electrónica en Salta, comentó que allí hubo “un proceso inverso”. “Habíamos establecido mayor gradualidad y la presión de la gente nos hizo modificar la ley”, dijo el mandatario salteño, casi un lobista de la empresa MSA, dueña del sistema.
Si el proyecto recibe cambios –los que el oficialismo necesita para ganarse los votos de buena parte del FpV-PJ-, el proyecto del Poder Ejecutivo volverá a la Cámara de Diputados, donde será determinante la posición del Frente Renovador de Sergio Massa. Dado que el período ordinario culmina el 30 de noviembre, es casi un hecho que las sesiones se extenderán, ya sea mediante prórroga o convocatoria a extraordinarias.