Después de atravesar momentos complicados donde ningún dirigente quería acompañarlo como vice hasta que apareció Gustavo Sáenz, Sergio Massa celebró en Córdoba el triunfo de Juan Schiaretti y trató de utilizar el envión en esa provincia para apaciguar los ánimos de derrota que varios dirigentes del Frente Renovador tienen.
“Que Córdoba siga teniendo un gobierno afín nos fortalece, nos da volumen y le da un liderazgo a De la Sota”, le dijo Massa a Letra P cuando bajaba del escenario que era pura alegría. “Nos parece que eso es muy bueno porque es en definitiva lo que tenemos que conseguir para que la argentina tenga dirigentes respetados territorialmente y no candidatos construidos con el dedo desde una oficina”, agregó.
-¿Cómo observa las alianzas que conforma Macri en las diferentes provincias, como fue el caso de Córdoba?
-Las construcciones tienen que ser los más plurales posibles, no hay que sectorizarse ni construir sólo con fanáticos, ahora ese pluralismo necesita además de algún sentido, en el caso de Córdoba es muy raro ver que quien trataba de payaso a Aguad era el jefe de campaña de Aguad, que quien trataba de delincuente a Mestre vaya en el mismo espacio que Mestre, y eso también para la gente se hace difícil de comprender. Hay que darle además de pluralismo coherencia a las construcciones.
-¿Cómo está hoy su candidatura, tras la pérdida de aliados...?
-De nuestra parte estamos bárbaro.
-¿Impactó a favor el relanzamiento que hizo semanas atrás?
-En las últimas tres semanas si me pongo frío a mirar números tuvimos un crecimiento muy significativo que tenemos que seguir consolidando.
-¿Y la fórmula Solá–Arroyo ?
-No tengo dudas que Felipe y Arroyo van a ser los más votados de la provincia.