Junto a Daniel Scioli y Carlos Zannini, la fórmula presidencial del Frente para la Victoria, desde Santa Rosa, recibida por el gobernador pampeano Oscar Jorge, y previa comunicación mediante videoconferencias con La Rioja, Villa María (Córdoba) y Río Grande (Ushuaia), la Jefa de Estado estuvo rodeada de la militancia kirchnerista y funcionarios nacionales.
Con la única fórmula oficialista para las elecciones presidenciales, además de los precandidatos a gobernador bonaerense, Aníbal Fernández y Julián Domínguez, Cristina Fernández de Kirchner recibió una amplia bienvenida por parte de distintas agrupaciones identificadas con el Gobierno.
Al final de su alocución, se refirió a la dirigencia del peronismo y sostuvo que “esto no puede ser una calesita donde giran siempre los mismos caballitos”. Así, pidió que “la política tiene que ser un recambio de dirigentes, no solamente del FpV, sino del peronismo”, ya que “necesita de nuevos cuadros nacionales, populares y democráticos”.
Para CFK, el trasvasamiento generacional se debe hacer “sin egoísmos, sin estar siempre el mismo en primera línea”. “Es necesario luchar por la patria y la Argentina. Que nadie se confunda, no vine solamente a entregar subsidios. Vengo a agradecer a los argentinos”, afirmó la mandataria.
Entre la entrega del decreto que la declaró huésped de honor de La Pampa y la firma de una línea de crédito de ampliación ganadera de esa provincia, la Jefa de Estado inauguró varias obras como el inicio inmediato de la segunda etapa del acueducto Río Colorado.
La alineación con el candidato del proyecto no tardó en llegar y, con su discurso, el gobernador local le dio la “bienvenida al compañero Daniel Scioli” y también a Zannini, en la primera aparición del ex motonauta con la Jefa de Estado luego del anuncio que lo dejó como el único representante del Frente para la Victoria para competir por el sillón presidencial.
“Algunos creyeron ver en este sistema de videoconferencias una suerte de conectividad, no es solamente eso, es la visión federal e integral que este Gobierno tiene del país. Porque esto que parece una conexión de imágenes o transmisiones es algo más profundo, más subterráneo en la comprensión de un país que necesita un desarrollo integral”, sostuvo la Presidenta en cuanto a todas las inversiones a lo largo y ancho del país, comunicado esta vez por las comunicaciones con otros puntos territoriales.
Con otros funcionarios a su lado como el secretario general de la Presidencia, Eduardo “Wado” De Pedro, el ministro de Agricultura Carlos Casamiquela, el gobernador de Chubut Martín Buzzi y el ministro de Educación, Alberto Sileoni, Cristina arremetió que “no se gobierna el país con chamuyo o globito, si no con número y gestión y de eso algo podemos decir”.
“El desarrollo del país no pueden estar a tiro de un decreto privatizador”, dijo y agregó que “hoy cantamos el himno con el pecho henchido de orgullo, no solamente porque hemos hecho un buen gobierno y recuperado la patria, que es mucho más importante”.
Asimismo, aseveró que su Gobierno es federal “en serio” y “no dejamos a nadie afuera”. “La Argentina es una sola y los 40 millones de argentinos pueden tener diferentes historias pero no puede haber nadie que se caiga y quede afuera”, añadió.
Mientras repasó "las políticas públicas activas tomadas desde el 2004 por Néstor Kirchner" para que no se pierdan puestos de trabajo y se recuperen las fábricas, en la Cadena Nacional número 26 en lo que va del año, apuntó a los que “pronosticaban calamidades y las diez plagas de Egipto”, ya que “hoy podemos decir que hemos crecido”.
Por último, sin nombrarlo, se dirigió al ex ministro de Economía de su gestión, hoy candidato a jefe de Gobierno porteño por ECO, Martín Lousteau, y lo consideró "un desagradecido" que pretende "dar algunas lecciones".
"Cuando escuchaba a estos que nos querían dar algunas lecciones, sobre todo algunos que me costó sangre sudor y lágrimas", sostuvo, al referirse al debate del miércoles por la noche que protagonizó Lousteau con el resto de los candidatos porteños.
"Nos gusta la gente que se hace cargo de las cosas, de lo que hemos hecho mal y de lo que otros han hecho mal también", dijo y agregó que son unos "desagradecidos y que no quieren reconocer lo que se ha hecho", al recordar lo sucedido en 2008 con la ley 125 del campo.