En Rosario

Cristina y un hasta luego: "Desde donde esté, siempre estaré con ustedes"

La Presidenta encabezó el acto por el Día de la Bandera en Rosario y brindó un discurso a modo de despedida. Además de los socialistas Bonfatti y Fein, estuvieron Scioli y Randazzo, entre otros.

Pasadas las 14:30 horas de este sábado y a menos de 10 horas de que venza el plazo para la presentación de las fórmulas que competirán en las PASO, la Presidenta comenzó su discurso.

 

Previamente, la intendenta rosarina Mónica Fein y el gobernador santafesino Antonio Bonfatti leyeron breves discursos. El mandatario pidió que los perdedores de los últimos comicios acepten los resultados electorales. Todo mientras los miles de militantes K no pararon de silbarlos y cantarles en contra.

 

Ambos dirigentes socialistas le entregaron a Cristina dos regalos: una réplica del Monumento a la Bandera y otra de la Casa de Gobierno.

 

Siempre bajo la atenta mirada del gobernador bonaerense y único candidato a presidente por el Frente para la Victoria Daniel Scioli, su compañero en la lista Carlos Zannini y casi todo el gabinete nacional, como Wado de Pedro, Aníbal Fernández y Florencio Randazzo, entre otros.

 

"Con los aciertos y errores que hemos cometido en estos 12 años de gestión, hemos protagonizado el mayor crecimiento económico con inclusión social desde que se tenga memoria", dijo la mandataria.

 

"No nací presidenta, nací militante", aclaró Cristina, haciéndose un lugar para recordar al fallecido ex presidente Néstor Kirchner. Luego le pidió a la oposición que superen las diferencias con los peronistas y frente a los ataques externos al país "seamos uno solo".

 

"Les pedimos a los demás, que con la misma grandeza superen esos prejuicios y frente a los grandes temas de la Patria, sin abandonar la legitimidad del derecho a disputar el gobierno", reclamó, pidiendo que unifiquen esfuerzos por ejemplo en el marco "del ataque que sufre nuestro país por parte de los fondos buitres".

 

Se esperaba que la Presidenta anuncie más concretamente qué iba a ser de su futuro después de diciembre, despejando dudas si va a ser candidata o no. No lo hizo, como tampoco confirmó la candidatura de su hijo Máximo como diputado por la provincia de Santa Cruz. Sí elevó su tono de voz, ya con todos parados aplaudiéndola, para poner puntos suspensivos a su accionar en los próximos meses: "Desde donde esté, siempre estaré junto a ustedes, en todos los momentos, buenos y malos".

 

María Eugenia Schmuck, presidenta del Concejo Municipal de Rosario.
Rogelio Frigerio en su despacho en la Casa Gris.

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